Shailene Woodley: «Me alegran las comparaciones con Jennifer Lawrence»
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Puede que el nombre de Shailene Woodley no resulte del todo familiar, pero eso está a punto de cambiar con "Divergent", la nueva franquicia destinada a los más jóvenes que arrasa en la venta anticipada de entradas y que convertirá a su protagonista, según los expertos, en la nueva Jennifer Lawrence.
"Jennifer es genial, es una actriz magnífica y me parece una persona estupenda. Si van a compararme con alguien, me alegro de que sea con ella", afirmó Woodley, de 22 años, la que fuera hija de George Clooney en "The Descendants"(2011) y una magnética figura adolescente de "The Spectacular Now"(2013).
Las comparaciones con la intérprete de "The Hunger Games"no se han hecho esperar: ambas proceden de la escena "indie", encarnan a las heroínas de dos potentes sagas de ciencia ficción y comparten un carisma, una naturalidad y una belleza suficientes para tener a Hollywood a sus pies.
Pero la experiencia es un grado y Woodley no dudó en contactar a su compañera para pedirle consejo antes de embarcarse en una aventura tan grande, temerosa de que aquel paso fuera a afectar demasiado a su vida personal.
"Tuve conversaciones con mucha gente, incluida ella. Me dio buenos consejos: no grabar un vídeo casero porno, no tomar drogas en público y no acudir al Whole Foods (un supermercado) el día del estreno de la película. Me dijo que todo lo que iba a suceder iba a ser positivo", indicó la joven.
"Divergent", la primera entrega de la saga basada en los libros superventas de Veronica Roth, está dirigida por Neil Burger y protagonizada por Woodley, Theo James, Jai Courtney, Miles Teller y Kate Winslet.
La cinta aterriza en las salas el día 21 y la venta anticipada de entradas apunta a una recaudación cercana a los 70 millones de dólares, similar a los ingresos del debut de "Twilight".
Se trata de un "thriller"de acción futurista que presenta una sociedad dividida en cinco facciones, a la que cada persona se debe encomendar y comprometer para el resto de su vida. Sin embargo, Tris (Woodley), supone una amenaza para el orden establecido ya que los resultados de su test desvelan que no encaja perfectamente en ninguna de ellas.
El estudio Lionsgate ya ha anunciado las fechas de estreno para la segunda ("Insurgent") y la tercera parte ("Allegiant"), fijadas para marzo de 2015 y marzo de 2016.
"Estoy emocionada. Realmente no tengo tiempo para prestar atención a lo que se habla sobre mí, pero sin duda, es un gran momento", afirmó la actriz, portada de múltiples revistas en la prensa estadounidense estos días como nuevo ídolo adolescente.
"Trato de seguir haciendo las mismas cosas. Me levanto, tomo un café y un batido, mis amigos me ayudan con el pelo y el maquillaje y mantengo conversaciones con los periodistas. Esa es mi realidad hoy día", declaró Woodley, que ya luce la melena corta de su personaje en la segunda entrega de la saga.
En mayo comenzará a rodar a las órdenes de Robert Schwentke, el cineasta que dirigirá "Insurgent". Para entonces, Woodley ya conocerá el rendimiento en taquilla de la primera parte, pero el aspecto económico no es algo que le quite el sueño.
"Voy al plató, hago mi trabajo y me voy. Entonces todo queda fuera de tu control. Solo esperas que quede bien, pero realmente está en manos del director, los productores, los editores y el propio estudio. La presión la tienen ellos", indicó.
El gran miedo de la actriz no tiene nada que ver con el hipotético e impensable fracaso de su película. Una parte central del crecimiento de su personaje en la cinta pasa por hacer frente a sus peores pesadillas y Woodley asegura tener fobia hacia los submarinos.
"¿Estar cientos de metros bajo el agua respirando aire reciclado y sin ventanas? ¿No es terrorífico? ¿Y si hay una fuga de agua y te hundes? La presión haría que se te salieran los ojos. Suena horrible", dijo entre risas.
La espontaneidad de Woodley es uno de sus mayores atributos. Es conocida su afición de abrazar a los periodistas antes de cada entrevista. Incluso conversa y muestra interés por las opiniones de su interlocutor.
"Me gusta ser así. Me sale natural", admitió.
Woodley, que se ve a sí misma como una "romántica empedernida", disfruta con el cine. Para ella siempre fue un hobby, desde que comenzó con 5 años a hacer anuncios. Ahora sabe que se ha convertido en su carrera porque absorbe todo su tiempo, pero la "pasión extrema"que siente hacia su profesión sigue intacta.
"Si no me divirtiera, no lo haría más", concluyó.