Prohibido matar vascos en Islandia
Estos eventos ocurrieron en un contexto histórico particular, y la comprensión de las motivaciones y circunstancias detrás de la matanza de vascos en Islandia en 1615 requiere un análisis detallado de los registros históricos y del contexto social, político y económico de la época
En el contexto histórico de Islandia en el siglo XVII, la matanza de vascos ocurrió debido a una serie de circunstancias y conflictos locales. Los balleneros vascos eran conocidos por adentrarse en aguas que no siempre estaban bajo la jurisdicción de Islandia, y en ocasiones podían incurrir en actividades consideradas ilegales o amenazantes para los intereses locales.
La historia está repleta de anécdotas, algunas de ellas con un trasfondo sangriento. En 1615, Ari Magnússon, un líder islandés de los Fiordos del Oeste y vasallo del rey danés Christian IV, ordenó la ejecución de 32 balleneros vascos que habían ingresado ilegalmente en sus aguas después de un naufragio. Aunque la ley era clara, los verdugos llevaron a cabo la sentencia con brutalidad, mutilando y deshonrando los cadáveres antes de arrojarlos al mar, como si fueran considerados paganos en lugar de simples marineros cristianos.
Cuatro siglos después, en el año 2015, islandeses y vascos firmaron un acuerdo simbólico de paz, marcando así un hito en la historia de ambos pueblos. Este acuerdo sirve como punto de partida para estudiar el trágico episodio conocido como el "asesinato de los españoles". Para el comisario del distrito de Hólmavík, Jónas Guomundsson, la derogación de la ley que permitía la ejecución de vascos es vista como un gesto simbólico, dado que ya no tenía relevancia práctica. Sin embargo, el tema ha cobrado relevancia en la actualidad, siendo abordado incluso en una novela de Julia Montejo titulada "Lo que tengo que contarte".