La guerra toma el salón del cómic

El cómic, como arte seriado, es sinónimo de acción, movimiento, energía y... guerra. Sí, la temática bélica siempre ha sido muy importante dentro del género, desde la simple exaltación épica de la contienda a la crítica o denuncia pacifista, mostrando los estragos de la guerra en la población civil. El Salón Internacional del Cómic de Barcelona dedica su 32 edición a este fenómeno en un año en que se conmemoran los 75 años del inicio de la II Guerra Mundial, el centenario de la I Guerra Mundial o el tricentenario de 1714. «Hay un gran número de obras maestras dentro del género bélico. Aprovechando las efemérides, hemos querido homenajear a los autores y los títulos más destacados», asegura Carles Santamaría, director de Ficomic.

Ganar espacio

El salón arrancará del 15 al 18 de mayo y lo hará multiplicando su espacio expositivo. Ocupará los pabellones uno y dos de la Fira de Montjuïc y de este modo pasará de 19.000 a 32.000 metros cuadrados. Las empresas expositoras se mantendrán en 145, pero se ganará en espacio para actividades paralelas y en comodidad para los visitantes. «Preferimos que el jueves algunos pasillos se vean vacíos a que el domingo tengamos que decir que está el aforo completo y dejar de vender más entradas», afirma Santamaría, que asegura que no se repetirán los colapsos del pasado Salón del Manga.

La gran exposición de este año, por supuesto, estará dedicada a la guerra, con más de 200 originales que irán de «Astérix y Obelix» a «La Gran Guerra» de Joe Sacco. La muestra tendrá un recorrido histórico y viajará de la batalla de las Termópilas de «300» al Sargento Nick Fury de Jack Kirby y Stan Lee en la Segunda Guerra Mundial. Además, se realizarán reconstrucciones bélicas, con 50 actores caracterizados, además de diferentes debates y mesas redondas con historiadores en la Universidad de Barcelona.

La guerra ha dado grandes dibujantes como Bill Mauldin, que ilustró sus experiencias como soldado raso en la Segunda Guerra Mundial, que recogió en el libro «Up Front». Otros genios del género son Jacques Tardi, la serie «Sargento Roc», de DC, o las incursiones del Capitán América contra los nazis. Luego está todo la ilustración de propaganda, que incluye a un Pato Donald pidiendo a los jóvenes que se alisten a las tropas. Del resto de exposiciones destacan las dedicadas al 75 aniversario de Batman, con un recorrido histórico por sus diferentes fases, y al 40 cumpleaños de Lobezno, a pocos días de que el personaje vuelva a protagonizar una película de los X Men.

Entre los artistas invitados destaca Joe Sacco, un habitual del salón cuyo prestigio ha ido creciendo año a año hasta convertirse en un referente del cómic documental. Este año presenta su representación de la I Guerra Mundial. Además, estará el británico Andrew Wildman, una de las firmas claves de los Transformers. Completan las estrellas invitadas Eduardo Risso, autor de «100 balas» o Mike Carey.

El cartel de este año es de Carlos Pacheco, dibujante español que triunfa en Estados Unidos en diversas series de superhéroes. El cartel muestra a una especie de Thor sobrevolando el cielo junto a centenares de otros superhéroes alrededor de la estatua de Colón. «Tenemos a un héroe del siglo XV que descubrió el nuevo mundo y tenemos como el nuevo mundo nos descubre ahora a nosotros», señala Santamaría, que afirmó que el tan ansiado Museo del Cómic de Badalona se está «desencallando» y que falta poco para que arranque.