Música

Britney: Baby, ¿ni una vez más?

La cantante termina con todos los rumores alrededor de un posible nuevo álbum: «¡Nunca!»

 La cantante estadounidense Britney Spears.
Britney Spears, durante una actuación en Offenburg, Alemania, en 2008PATRICK SEEGERAgencia EFE

¡Nunca! ¡Jamás de los jamases! ¿Un escenario? ¿Un estudio? ¿Una gira? ¡Ni en pintura! Bueno, no ha sido tan redundante y repetitiva, pero sí igual de tajante: Britney Spears nos lo ha dejado bien claro. No volverá a relacionarse de ninguna manera con la industria musical. ¡Atrás, discográficas y compañías de grabación del mundo! Ahora, lo que quiere la diva es vivir de su propio cuento o, más bien, de su propio talento. No es para menos en una artista que canta, baila, actúa, diseña, compone... Bueno, que ha cantado, bailado, actuado... Lo suyo es genio e ingenio de nacimiento. Aunque con fecha límite.

Podríamos marcar 2018 como el último año en que Britney se subió a un escenario. No podía más. Sus conciertos eran innumerables en poco tiempo y a ritmos frenéticos. Una persona anónima, que se aseguraba cercana a la artista, llegó a confesar a «Page Six» que la cantante «tiene traumas por las giras. Durante años le entregaron itinerarios agotadores y la obligaron a actuar, incluso antes de su tutela». Porque si le sumamos al agotamiento el caso de James Jamie Spears, apaga y vámonos. El férreo sometimiento bajo su padre en el que vivía al fin terminó, aunque no sin dejarle huella. La artista llegó a confesar que «dejar de cantar es, en parte, una forma de decirles (a su familia) ‘‘que os jodan’’. Mis metas ahora son hacer cosas que me asusten, pero no mucho. No soy una ‘‘superwoman’’».

Pero, de momento, la industria musical debe asustarle bastante, muchísimo, pues no piensa verla ni de lejos. Recientemente se han sucedido los rumores que aseguraban que Spears estaba trabajando en un nuevo álbum. Todo comenzó el pasado verano, cuando el productor Caleb Stone compartió una fotografía, más tarde eliminada, con Tor Erik Hermansen y Mikkel S. Eriksen. Junto a la imagen, decía que el proyecto estaba en marcha: «He pasado los últimos nueve meses en los Alpes siberianos creando ritmos para el nuevo álbum de Britney Spears con los hermanos Stargate. Se vienen cosas muy grandes».

Si bien actualmente ya no se sabe qué es lo que es cierto y lo que no (gracias, IA, por impulsar aún más confusiones), la artista se ha encargado de dejar clara la verdad. A través de una de sus virales publicaciones en redes sociales, la de «Toxic» escribe: «Solo para que quede claro, la mayoría de las noticias son basura. No paran de decir que estoy recurriendo a gente al azar para hacer un nuevo álbum. ¡Nunca volveré a la industria de la música! ¡Cuando escribo, escribo por diversión o para otras personas! He creado más de 20 temas para otras personas en los últimos dos años. ¡Soy una escritora fantasma y honestamente lo disfruto así!». A este comentario, repleto de exclamaciones y, por tanto, entendemos que de hartazgo, le acompañaba una imagen irónica: «Salomé con la cabeza del Bautista», obra de Guido Reni. Una pintura sensual, agresiva, inocente, fría y hermosa a la vez, como la propia Spears. Entonces, Britney, ¿ni siquiera como decía tu icónica canción, «Baby, one more time»? («Baby, una vez más»). De momento, nos ha quedado claro: «¡Nunca!»