Teddy Bautista, sin pensión y a la espera del juicio de SAGA
Nadie ve al ex directivo
Las dos últimas veces que se ha visto a Teddy Bautista en público fueron en abril de 2012, hablando por teléfono sentado en una marquesina mientras esperaba al metro en una parada al aire libre –las cámaras de Antena 3 lo captaron en su día a día, ya convertido en ex directivo de la SGAE–, y en junio del mismo año, cuando compareció ante un juzgado de Majadahonda por una demanda interpuesta por el arquitecto Santiago Fajardo. Sólo una semana después, la demanda fue desestimada. Pero para Teddy, al que nadie parece haber visto en meses salvo, acaso, su familia y amigos, el periplo legal no ha acabado. Su principal cita con la Justicia, aunque sin fecha, será el juicio por la «operación SAGA». El juez Pablo Ruz le imputó –por apropiación indebida y delito societario– junto a José Luis Rodríguez Neri y otros directivos o asociados de la trama parasitaria de la SGAE como Rafael Ramos. Pero no se espera que la instrucción concluya antes de un par de años y el juicio podría tardar en celebrarse otros cinco. Entre medias, Bautista puede recurrir –aún no lo ha hecho– la impugnación de su plan de pensiones vitalicio: la SGAE debía pagarle hasta cinco millones y medio de euros –unos 25.000 euros mensuales–, pero en junio de 2012 la nueva Junta Directiva entendió que ya no estaba atada al compromiso. De igual forma, tampoco cobrará un millón y medio de indemnización por su despido, decisión que tampoco ha recurrido. En la entidad llevan tiempo sin verle ni saber de él, según aseguran varias fuentes, extrañadas al tratarse de un ex directivo activo y siempre presente en la casa, incluso en los momentos más complejos.