El coronavirus salpica el deporte mundial

Juan Antonio Orenga, exseleccionador español de baloncesto, entrena al Guangzhou Long-Lions uno de los equipos que juegan en la CBA, la élite del baloncesto chino. La competición se detuvo con motivo de la celebración del año nuevo en el país. Iban a ser cuatro días de parón. Los estadounidenses del equipo aprovecharon el permiso para viajar a su país. Orenga regresó esos días a Madrid, pero... La explosión de coronavirus provocó que el parón por el Año Nuevo se prolongara hasta el 15 de febrero. Eso fue la primera comunicación. La siguiente es que la competición no se va a reanudar en ningún caso antes del 15 de marzo. Casi dos meses de parón. “La fecha es la clave del estado de pánico que se vive en el país porque con la festividad del año nuevo se producen millones de desplazamientos que podían aumentar el contagio”, asegura Orenga.

World Athletics, el organismo rector del atletismo internacional, ha ido más lejos. El Campeonato del Mundo en pista cubierta que debía celebrarse en Nanjing, del 13 al 15 del próximo mes de marzo, se ha suspendido hasta 2021 debido a la aparición y propagación del coronavirus. Un día después de afirmar que estaba "supervisando cuidadosamente” lo que está sucediendo en China, y estando “en estrecho contacto con la Organización Mundial de la Salud”, World Athletics decidió seguir el consejo de su propio equipo de responsables médicos. “Sabemos que China está haciendo todo lo posible para contener el nuevo coronavirus y los apoyamos en todos sus esfuerzos, pero es necesario proporcionar a nuestros atletas, federaciones miembro y socios un camino claro hacia adelante en lo que es un conjunto complejo y de rápido movimiento de circunstancias”, ha subrayado World Athletics. “El consejo de nuestro equipo médico, que está en contacto con la Organización Mundial de la Salud, es que la propagación del coronavirus tanto dentro de China como fuera del país todavía está en un nivel preocupante y nadie debería seguir adelante con ningún evento importante que pueda posponerse”, se asegura en un comunicado. “Hemos considerado la posibilidad de trasladar el evento a otro país y nos gustaría agradecer a las ciudades que se han ofrecido como voluntarias para organizar los Campeonatos. Sin embargo, debido a las preocupaciones que aún existen con respecto a la propagación del virus fuera de China, hemos decidido no optar por esta opción, ya que puede llevar a un mayor aplazamiento en una fecha posterior”, ha indicado.

Hay más. Se ha suspendido la maratón de Hong Kong donde había más de 70.000 inscritos; un combate de boxeo entre José Ramírez y el ucraniano Viktor Postol, que iba a ser en Mission Hills (a más de 1.500 kilómetros de Wuhan), se han cancelado los Campeonatos de Asia de Atletismo, se han trasladado de sede eliminatorias de la Copa Federación de tenis, partidos del Preolímpico femenino de fútbol...

La Asociación China de Fútbol también ha decidido suspender la Superliga debido al brote de neumonía causado por un nuevo coronavirus que ya ha causado al menos 170 muertos. “Para cooperar con la prevención y el control del brote y para garantizar la salud de jugadores, empleados y aficionados, se pospondrá el comienzo de la temporada 2020 para partidos de fútbol de todos los niveles en el país", se afirma en un comunicado sobre una competición que no tiene previsto arrancar antes del 22 de febrero. La Superliga china -que consiguió notoriedad mundial desde hace años por sus fichajes de estrellas por precios y salarios desorbitados- no arrancará y sus equipos participantes en la Liga de Campeones asiática jugarán como visitantes los tres primeros partidos.

El Wuhan Zall, el equipo de la ciudad de Wuhan, epicentro del brote y capital de la provincia de Hubei, llegó ayer al aeropuerto de Málaga para continuar en el sur de España con su concentración de pretemporada. José González, su técnico español, aseguró que su estancia en España "no supone un peligro para nadie”.