Atlético de Madrid

Atlético de Madrid

Los indignados de Simeone

Parecía algo imposible por el liderazgo del Cholo en el vestuario, pero este curso varios pesos pesados se han rebelado ante una decisión del técnico, entre ellos, la estrella Joao Félix

Luis Suárez, en una sustitución
Luis Suárez, en una sustituciónAFP7 vía Europa PressAFP7 vía Europa Press

El Elche llega hoy al Metropolitano como bálsamo para la resaca que todavía arrastra el Atlético tras la derrota en el derbi ante el Real Madrid. Acudían los rojiblancos a Valdebebas hace justo una semana con la posibilidad de casi sentenciar la Liga o, al menos, dejar al rival más peligroso muy lejos en cuanto a puntos. Pero sucedió todo lo contrario. Los blancos fueron muy superiores, sumaron los tres puntos y dieron la razón a Simeone, empeñado en que si hay un candidato claro al título liguero no es el Atlético, por mucho que a día de hoy sea el líder empatado con dos equipos que tienen tres y dos choques más disputados.

Vive el Cholo feliz en su paraíso del partido a partido y no tanto con las últimas rebeliones que se han producido a bordo. El club de los indignados en el vestuario del Wanda va creciendo con el paso de los partidos, desde Luis Suárez a Joao Félix pasando por Saúl, que quizá sea el caso más sorprendente por el talante y la fe del centrocampista en el cholismo. «La mejor manera de resolver las situaciones es hablando, y hacerlo de puertas para adentro», decía el técnico argentino en la previa del partido de Copa ante el Cardassar. Antes ya había reconocido que si querían saber más sobre el enfado de ciertos futbolistas era mejor preguntar directamente a los protagonistas. Está viviendo el Atlético esta temporada cosas muy poco habituales en la era Simeone. Una de ellas es la de ver a un equipo mucho más ofensivo, incluso atrevido en ataque, aunque esa tendencia quedó un poco en duda en el Di Stéfano, donde se volvió a ver a un Atlético poco valiente ante el Madrid.

Lo otro que no era habitual y ahora sí es que sus chicos muestren su desacuerdo con algunas decisiones del entrenador. Joao Félix se marchó al banquillo en Valdebebas dando patadas a una silla e insistiendo en los gestos de enfado, por si las cámaras no lo habían captado a la primera. El portugués se pasó el partido escuchando a su entrenador pedirle que bajase a defender las llegadas de Modric y se fue con la sensación de que no había podido desplegar ni la mitad de su potencial porque la preocupación era cubrirse más que hacer daño al rival. Siente el portugués que podría ser más protagonista y líder de lo que es, pero no encuentra ese espacio para crecer en un ecosistema en el que el único que marca los tiempos es Simeone. Luis Suárez también quedó muy descontento el decisivo partido ante el Salzburgo de la Liga de Campeones. «Luis es muy importante para nosotros y el fútbol le va dar mejor ritmo para lo que viene. Con esta semana de entrenamientos buenos que hemos tenido podemos encontrarnos con ese jugador determinante, fuerte y con jerarquía, y de los mejores que hay en la zona que se mueve», alababa al uruguayo su entrenador, feliz de recuperar ante el Elche a Diego Costa después de su lesión. «Volverá a estar con nosotros y es una buena noticia, para él, por su salud, y para el equipo porque aporta jerarquía, personalidad y agresividad. Su regreso genera entusiasmo y alegría y psicológicamente lo veo espectacular. Diego es un tipo muy positivo y muy fuerte mentalmente, nada le saca de su espacio de lucha y pelea en la vida y en el fútbol».

Saúl también torció el gesto cuando vio su dorsal en la tablilla en el minuto 65 del choque ante el Salzburgo. Y esto ya sí que es extraordinario, porque si hay un núcleo duro en cuanto a la fe en Simeone, en él está el canterano. En otro vestuario la cosa podría ser preocupante, pero en el Atlético siempre se acaba imponiendo el carisma y el liderazgo de uno de los entrenadores mejor pagados del mundo. Su figura es incuestionable dentro del club, a pesar de que haga mucho tiempo que no consigue un título importante. La Liga se le ha puesto de cara con el arranque titubeante de Barça y Madrid y hoy tiene otra oportunidad de seguir sumando en su estadio, donde sólo ha cedido un empate este curso.