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Fútbol

Las dudas vuelven al Barcelona, que empata con el Valencia (2-2) y gracias

El equipo azulgrana jugó desordenado y mal, pero se llegó a poner 2-1 y se dejó empatar. Otro paso atrás en la Liga. Polémica por el penalti que dio lugar al 1-1 de Messi

El delantero del FC Barcelona Leo Messi, desolado durante el partido ante el Valencia
El delantero del FC Barcelona Leo Messi, desolado durante el partido ante el ValenciaEnric FontcubertaAgencia EFE

En español se habla de «no dar una a derechas» cuando todo se hace mal. Una sí dio el Barcelona contra la Real Sociedad, al menos durante la primera hora. Aquello parecía el principio de algo por la forma en la que presionó y se animó el equipo azulgrana, pero apenas unos días después, no se vio nada de eso ante el Valencia y volvieron las dudas en esta Liga que se le puede hacer eterna y en la que no le queda mucho para bajar sus pretensiones: de luchar por ganar el título a pelear por quedar entre los cuatro primeros y entrar en Champions, porque si no lo logra sería un desastre económico.

No venció el Barcelona porque no lo mereció. Simple. Es más, durante la mayor parte de la tarde fue superado en el verde por su rival, que le perdonó la vida varias veces. Desordenado y roto de nuevo, la presión del equipo de Koeman era inofensiva y el Valencia podía salir. Como casi siempre en este tipo de situaciones, la «culpa» hay que repartirla, porque la verdad es que el conjunto de Javi Gracia también lo hacía de maravilla, sobre todo con Guedes, que firmó un encuentro memorable. Se quedaban los delanteros valencianistas con los centrales del Barça y les podían. El tanto de Diakhaby llegó en un córner, pero bien pudo hacerlo antes si no hubiera sido por Ter Stegen. El defensa remató solo. Griezmann perdió la marca y se quedó en los bloqueos. Lo pagó después lanzando la pelota a la grada. Pero el tanto ya había subido al marcador.

Era muy directo y muy eficaz el Valencia y no encontraba el Barcelona la forma de hacer peligro pese a las buenas maneras de Pedri. Llegaba una y otra vez por la izquierda para ponérsela a Jordi Alba y que sus mil centros no fueran a ninguna parte. Ter Stegen evitó el segundo ante un cabezazo de Maxi y Messi empató en una acción con mucha polémica, de las del fútbol del VAR. Pitó penalti Hernández Hernández por un leve empujón de Gayá a Griezmann, y mostró la roja al lateral. Le avisaron desde la sala del VAR y al revisarla... Mantuvo la pena máxima, pero cambió la expulsión por amarilla. El contacto es muy pequeño, la duda puede ser si abajo, en los pies, puede haber algo. El caso es que Leo lanzó el penalti y lo falló, pero en el rechace, tras un pase rebotado de Alba, encontró el empate de cabeza.

Se podía dar con un canto en los dientes el equipo de Koeman. Con lo mal que había jugado, no se encontraba en mala posición. El desconcierto continuó, pese a la entrada de De Jong, que descansó de inicio. Guedes se colaba en la espalda de la defensa y Soler le encontraba con facilidad. Aprovechaban a la perfección los espacios, mientras que el juego de posesión del Barça le inducía al barullo. Cheryshev no acertó con el tercero en una posición inmejorable y a la vuelta un error en cadena del Valencia dentro del área permitió a Araujo rematar el 2-1 de manera acrobática.

Casi sin saber cómo, ya lo tenía ahí el Barcelona. Pero con el marcador a favor tampoco supo jugar. Coutinho es un jugador bonito de ver, pero para no aportar soluciones, Griezmann no puede perdonar tanto, Braithwaite pelea, pero le falta algo de calidad, Trincao se lía consigo mismo, Messi volvió a esa versión de sí, chutar mucho, pero desde fuera del área, como si le diera pereza buscar algo más... El Valencia no se vino abajo y el Barça no supo acunar el partido. De nuevo en una jugada lanzada por Guedes, Maxi empató, adelantándose a Mingueza. Los centrales canteranos esta vez flojearon.

Quedaba tiempo para todo. Koeman cambió hasta de sistema, con tres centrales, y por atropello ahí estuvo el tercer gol, lo mismo que en la portería de Ter Stegen. Pero nadie acertó en ese partido roto ya por el cansancio.