España, “¡bien, coño, bien!”: las Guerreras se clasifican para los Juegos de Tokio

El pase por la espalda de Nerea Pena abrió una nueva dimensión: los cuatro goles de diferencia ante Argentina, el comienzo del despegue camino de los Juegos de Tokio. Era el preolímpico de balonmano femenino que se ha disputado el fin de semana en Llíria, Valencia, y las Guerreras cumplieron el objetivo, que en la última jornada estaba en lograr al menos un empate ante el equipo albiceleste. No era una labor excesivamente complicada, la diferencia de nivel es importante, pero están los nervios, la responsabilidad... Y el grito de guerra del conjunto nacional se oyó alto y claro: “España, bien, coño, bien”.

El pase de fantasía de Nerea y el tanto de Marta López, que había abandonado en ese momento su posición de extremo derecho para ganar superioridad en el otro lado, tuvo continuidad con un parcial de 7-0 que llevó a España a las rentas cómodas ya en la primera parte. A disfrutar. Marta anotó ese tanto “fuera” de sitio, pero en su lugar, en la esquina, se puso la botas. Ahí había una vía de agua que Argentina no supo parar: la encontraban y ella resolvía una y otra vez para que el marcador se disparara y llegara al descanso a los nueve goles de ventaja, la máxima. Todo en diez minutos frenéticos, en los que también colaboraron la defensa de Ivet Musons, Ainhora Hernández y Lara González y las paradas de Silvia Navarro. Las Guerreras aceleraron en ese tramo final del primer tiempo y las dudas quedaron atrás.

Porque el comienzo fue bueno: 3-0 y cinco minutos sin marcar el equipo suramericameno, pero a partir de ahí hubo un rato a trompicones. Del 1-4, al 5-5; del 5-8, al 9-10, con tiros a los palos de Almudena Rodríguez, Nerea Pena, Mireya González... Pero el pánico no llegó a cundir y la buena defensa y el camino abierto para encontrar a la extremo derecha española trajeron la calma. Sólo marcó un tanto más Argentina antes del parón, que intentó varias defensas, como una mixta para anular a Nerea Pena. No pararon a las Guerreras y sí colapsaron en ataque, donde Karsten, que había comenzado amenazante, se apagó.

Sólo la confianza podía jugar una mala pasada a España, pero Darly Zoqbi demostró que la portería de España tiene cuatro manos y cuatro piernas. Si Navarro se lució en la primera mitad, ella lo hizo después para acabar con cualquier esperanza. Menuda pesadilla fue, menuda exhibición dio, paradas por todos lados que incluso hicieron que las autoridades que había en el pabellón Pla de L’Arc de Llíria se levantaran y aplaudieran. Y en ataque hubo goles y minutos para todas, las más habituales y las menos, como Silvia Arderius o Lysa Tchaptchet. El marcador se movió todo el rato por los diez goles de ventaja o más. España, la subcampeona del mundo en 2019, no hay que olvidarlo, estará en los Juegos de Tokio. Será la tercera cita olímpica consecutiva. El mérito es inmenso.

16- Argentina: Carratu (p), García (1), Crivelli (-), Mena (1), Bolling (3), Gandulfo (-), Karstem (4, 3p) -siete inicial- Pizzo (1), Menéndez (-), Mendoza (1), Gavilán (-), Nino (p), Cavo (3), Sans (2), Casaola (-), Pedernera (-).

31- España: Silvia Navarro (p), Alicia Fernández (3, 1p), Mireya González (2), Carmen Martín (6, 3p), Jennifer Gutiérrez (1), Nerea Pena (5, 3p), Eli Cesáreo (2), Ainhoa Hernández (2) -siete inicial- Marta López (7), Silvia Arderius (1), Lara González (-), Sole López (1), Almudena Rodríguez (1), Ivet Musons (-), Darly Zoqbi (p), Lysa Tchaptchet (-).

Árbitros: Cristian Lemes, Mathias Sosa (Uruguay). Excluyeron dos minutos a Gandulfo, Mireya González (2), Eli Cesáreo, Ivet Musons, Almudena Rodríguez y Bolling.