F-1

Fórmula Uno

Alonso, sin errores, a pelear con los Red Bull en Melbourne

El bicampeón del mundo regresará este fin de semana al circuito en el que debutó en la Fórmula Uno

Fernando Alonso corre este fin de semana el Gran Premio de Australia
Fernando Alonso corre este fin de semana el Gran Premio de AustraliaSTREFE/EPA

Fernando Alonso, gran protagonista a los 41 años del arranque del Mundial de F-1, con dos podios en sus dos primeras carreras con Aston Martin, intentará frenar a los dominantes Red Bull en el Gran Premio de Australia, que se disputa este fin de semana en Melbourne. "Checo" Pérez, de 33 años, logró hace dos semanas, saliendo desde la pole, su quinta victoria desde que corre en la F-1, al brillar en la noche de Yeda. En una pista urbana en la que su compañero, el neerlandés Max Verstappen -vencedor en Baréin-, conservó el liderato del Mundial después de remontar desde la decimoquinta plaza en parrilla y sólo después de marcar (en la última) la vuelta rápida en carrera. Lo que le da una ventaja de un punto sobre el mexicano en la clasificación del certamen (44-43).

Alonso, tercero en el Mundial, con 30 puntos, firmó en Arabia -donde Carlos Sainz (Ferrari) fue sexto- su podio número cien en la categoría reina. El segundo en sólo dos semanas; el tercero en un año y cuatro meses (desde el de Qatar 2021); y el cuarto en casi nueve: espacio de tiempo que pasó desde el que había logrado en su último año con Ferrari, 2014, cuando fue segundo en Hungría.

El doble campeón mundial asturiano, la gran sensación del comienzo de temporada, firmó a orillas del Mar Rojo un podio de ida y vuelta, que se había ganado en pista y que recuperó después de que -una vez festejado el tercer puesto en la ceremonia de entrega de premios, junto a Verstappen y a "Checo"- lo sancionasen con diez segundos. Por lo que durante un par de horas el tercer puesto fue del inglés George Russell (Mercedes), finalmente cuarto en Yeda.

Alonso había sido sancionado con cinco segundos por no encuadrar perfectamente el AMR23 en su cajetín (el segundo) de la parrilla de salida. Mientras cumplía esa penalización, durante su "pit stop", uno de sus mecánicos rozó ligeramente su coche con el gato; motivo por el que, después de no haberlo hecho durante 35 vueltas, le anunciaron, tras la ceremonia del podio, la imposición de una segunda sanción de otros diez segundos.

Fernando, que en la salida había adelantado a "Checo" -que más adelante recuperó el primer puesto- ni se inmutó por una sanción ridícula, exultante al comprobar que su coche, después de haberlo sido en Sakhir -una pista bastante abrasiva y con varias curvas lentas-, también había ido bien en Yeda. En un circuito, el más rápido de los urbanos, con unas características muy diferentes al anterior, con mucho menos desgaste para los neumáticos.

Aston Martin reaccionó con celeridad tras la carrera de Yeda. Presentó hasta siete pruebas audiovisuales de otros tantos coches que, en idéntica situación a la vivida por Alonso, no habían recibido sanción alguna; y a la FIA (Federación Internacional del Automóvil) no le quedó más remedio que rectificar y devolverle la tercera plaza al piloto asturiano. Alonso se enteró de la noticia cuando estaba prácticamente subido ya al avión de salida de Arabia Saudí.

La F-1, en la que cada vez cobra más importancia el idioma español (Sainz ocupa el cuarto puesto de la general, con 20 puntos: los mismos que suma el séptuple campeón mundial inglés Lewis Hamilton, de Mercedes), llega este fin de semana a su tercer escenario de la temporada: el circuito semiurbano de Albert Park.

La de Melbourne es una pista de 5.278 metros y catorce curvas (cinco de ellas a la izquierda); de tracción y curvas de celeridad media, en la que la velocidad punta no es tan determinante. Y en la que, en seco se rodará con neumáticos de la gama de compuestos intermedia. La misma que se usó en Yeda; es decir: los C2 (duros, reconocible por la raya blanca), los C3 (medios, raya amarilla) y los C4 (blandos, roja).

Por las características de la pista, diferentes a las de las anteriores; después de este Gran Premio se podrá tener una proyección más aproximada de lo que se puede esperar de una temporada, la más larga de la historia, que se cerrará en Abu Dabi el próximo 26 de noviembre después de un total de 23 carreras.

Alonso vuelve al circuito en el que debutó en la F-1 hace ya 22 años; y en el que logró, en 2006 -el año de su segundo título- una de sus 32 victorias en la categoría reina, en la que obtuvo la primera hace casi veinte años; y la hasta ahora última hace casi diez.

En Albert Park, el año pasado "Checo" acabó segundo, por detrás del monegasco Charles Leclerc, compañero de Sainz en Ferrari. La escudería más laureada de la historia, que no pasa del cuarto puesto en el Mundial de constructores, encabezado ya claramente por Red Bull; y en el que Aston Martin y Mercedes comparten la segunda plaza.

En Australia, Fernando también sufrió el accidente más espectacular de su carrera en la F-1, en 2016; cuando, tras tocar, cuando iba a adelantarlo, el Haas del mexicano Esteban Gutiérrez, salió disparado, dando varias vueltas de campana; antes de salir, por fortuna, prácticamente ileso (dada la magnitud del percance) del McLaren que pilotaba esa temporada.