Exposición
Dolor y consternación el día después
El Ayuntamiento de Valladolid se ha puesto a disposición de la familia de Lalo García para los actos fúnebres que decida para una despedida multitudinaria.
El dolor y consternación siguen presentes en el día después de la aparición del cadáver de Lalo García y esta mañana el Ayuntamiento de Valladolid se ha puesto a disposición de la familia del ex jugador de baloncesto para los actos fúnebres que decida, incluido el pabellón Pisuerga para una despedida multitudinaria.
Francisco Javier León de la Riva, ha dicho que entendería "perfectamente"que sus allegados de decantaran por la intimidad, ha declarado a los periodistas después de inaugurar esta mañana la 23ª Feria Nacional de Artesanía en el paseo central del Campo Grande.
El cadáver de Lalo García, de 44 años, fue encontrado el martes por unos piragüistas en las aguas del río Pisuerga a su paso por Valladolid, muy cerca del polideportivo en el que desarrolló toda su trayectoria como jugador de baloncesto del Fórum Filatélico, trece temporadas desde su debut en la ACB con Pepe Laso de entrenador.
"Ha sido la figura más importante en la historia del baloncesto de Valladolid y su muerte me afecta muy personalmente no sólo como alcalde y aficionado al baloncesto, sino como amigo personal de él y de su familia", ha resumido el alcalde acerca de Lalo García, cuya desaparición fue denunciada por su madre el pasado 4 de marzo.
Mike Hansen, compañero de Lalo García en el Fórum Filatélico y unido a su persona por lazos familiares y afectivos, ha pedido esta mañana "respeto y cariño en estos momentos tan complicados"para la familia del exjugador de baloncesto fallecido.
Hansen, a través de un comunicado que ha leído el presidente de la Fundación Baloncesto Valladolid, Juan Vela, ha agradecido el trato dispensado por las fuerzas de seguridad, amigos, familiares y medios informativos durante los veintiocho días en que Lalo García estuvo desaparecido.
Ha recordado a la prensa en este sentido "el impacto que pueden tener sus palabras, artículos e imágenes", de ahí que haya pedido que mantenga "la misma línea que hasta ahora".
"Quiero que la gente recuerde a Lalo no sólo como el gran deportista que fue y por su dedicación y entrega a un club y a una ciudad, sino por su generosidad hacia todos, su sentido del humor y el gran amor que profesó a su madre, familia, hijos y amigos", ha advertido Hansen.
El entrenador del Mywigo Valladolid, Porfirio Fisac, ha afirmado también hoy que Lalo García "era un ídolo para mucha gente"y que ahora, tras su muerte, es "una leyenda porque seguramente no era el jugador más talentoso, pero el empuje de ambición y su forma de transmitir al público le hacían único".
"Transmitió el corazón de Valladolid dentro de una cancha", ha añadido Fisac, visiblemente afectado por el fallecimiento del que fuera jugador del CB Valladolid durante trece temporadas y del que ha recordado "su sonrisa perenne, siempre dispuesta para todo el que se le acercaba".
El técnico del Mywigo ha realizado estas declaraciones antes del entrenamiento matinal, a las que se ha sumado Román Montañez, jugador que compartió vestuario con Lalo García en la última temporada que éste defendió la camiseta morada antes de su retirada en 2001, y que fue "un referente en Valladolid".
"Lalo quiso al club por encima de todo. Fue un chico que salió de la cantera de los colegios y llegó a lo más alto, vio cómo retiraban su camiseta y cómo todo un pabellón se ponía de pie ovacionándole en el que fue su último encuentro", ha evocado Montañez.
"A los jugadores que llegábamos al equipo nos inculcaba la importancia del baloncesto en Valladolid y me quedo con sus palabras de ánimo, con su saber estar y su manera de decirte cómo ser un buen profesional. Se retiró muy joven y después la vida le dio un golpe muy duro que, al final, ha sido definitivo", ha concluido.
Durante las últimas horas, las muestras de cariño y apoyo se han sucedido en el mundo del deporte, ya que Lalo García fue el jugador más emblemático de la mejor época del Fórum Filatélico de Valladolid, equipo en el que coincidió con estrellas como el gigante lituano Arvidas Sabonis y el brasileño Óscar Schimdt Becerra.
De hecho, la camiseta con el número cinco de Lalo García es la única que pende en lo alto del polideportivo Pisuerga al ser retirada por el conjunto vallisoletano en señal de homenaje por su trayectoria, siempre ligada al club de su vida.
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