F-1

Fórmula 1

Del rescate a la desgracia

Momento en el que el helicóptero de rescate se llevó a Schumacher.
Momento en el que el helicóptero de rescate se llevó a Schumacher.larazon

Desde que Michael Schumacher saltara a la escena de la Fórmula-1 siempre fue conocida su afición por el esquí. Junto con otras especialidades relacionadas con el motor, los deportes de invierno siempre atrajeron al alemán. Tras su fichaje por Ferrari en 1996, las concentraciones en la estación invernal de Madonna di Campiglio se convertían en el escenario perfecto para que Schumacher mostrara su elevado nivel de esquí. A veces, incluso sufría alguna caída recogida perfectamente por los objetivos de la prensa, sobre todo italiana, que al principio no mostró el apoyo esperado al piloto. La zona donde Michael sufrió el accidente está situada a 1.700 metros de altura en los Alpes franceses, concretamente en la estación de Meribel. La cota máxima se halla a 2.953 metros. Se trata de una exclusiva zona ubicada en el centro de Los Tres Valles con más de 600 kilómetros de pistas donde «Schumi» tiene una casa valorada en más 5 millones de euros. El alemán es considerado un experto esquiador y es conocido por planificar muy bien las rutas y las pistas por las que se desliza. El teutón evitaba siempre las cotas más altas por temor a las avalanchas y siempre iba perfectamente equipado, tal y como quedó demostrado en el momento del accidente.

El pasado domingo, a eso de las 10:00 h, partió con un grupo de amigos y su hijo Mick (14 años) para atravesar algunas de las pistas de la estación gala. Según confirmaron los miembros del equipo de rescate y la propia portavoz del piloto, Sabine Kehm, el piloto perdió el control cuando trataba de socorrer a un compañero de ruta que había caído momentos antes. Fue en ese instante cuando «Schumi», que esquiaba entre pistas (entre una roja y una azul) también sufría una caída con tan mala fortuna que se golpeó la cabeza.

Desde ese instante se activaron todas las medidas de seguridad de la estación invernal y poco después un helicóptero medicalizado se posaba a escasos metros de donde se había producido el accidente. A partir de ahí, todo un dispositivo se ponía en marcha para salvar la vida del mejor piloto de la historia de la Fórmula-1.