"Caso Alves"

Diez pruebas claves en el juicio por violación de Dani Alves: una de ellas, a su favor

Los vídeos, las pruebas forenses y los testimonios de al menos 22 testigos marcarán el futuro penal del brasileño.

Diez pruebas claves en el juicio de Alves que arranca el lunes
Diez pruebas claves en el juicio de Alves que arranca el lunesArchivo

El "caso Alves" entre en su fase final y la Ciudad Condal se prepara para acoger a partir del lunes el juicio más mediático de los últimos años. La Audiencia de Barcelona juzgará los días 5, 6 y 7 de febrero al futbolista Dani Alves, a quien la Fiscalía acusa de violar a una joven en un reservado de una discoteca de la capital catalana el 30 de diciembre de 2022 y para quien pide nueve años de cárcel. Un juicio en el que la protección de la presunta víctima será clave.

El juicio no será a puerta cerrada con la excepción de cuando declare la presunta víctima. La declaración de la mujer se grabará pero "para evitar que se pueda filtrar su imagen o su voz", la grabación se hará con la voz distorsionada y la imagen pixelada. Todos deberán referirse a ella como "la denunciante" y estará separada de Alves por un biombo para evitar que haya contacto visual entre ellos.

En el juicio, se espera que declaren un total de 22 testigos, incluyendo al propio Alves y la esperada declaración de Joana Sanz, así como a peritos que explicarán los informes médicos de la víctima y los daños que sufrió. También se visionarán imágenes captadas en la puerta de la discoteca y por agentes de los Mossos d'Esquadra que acudieron a atender a la mujer.

Gracias al "blindaje" por parte de los Mossos del baño en el que se produjo la agresión, huellas dactilares y pruebas de ADN complican y mucho la defensa del brasileño.

Estas son las pruebas claves del caso

1. Declaración de la víctima

Desde un primer momento, la Unitat Central d’Agressions Sexuals (UCAS), un grupo de investigadores de los Mossos d’Esquadra, dio credibilidad al relato de la mujer, que aseguró que fue llevada contra su voluntad por Alves a un baño en el área VIP del club y luego fue abofeteada y violada. La joven no ha cambiado ni un ápice su versión desde que denunciara al jugador. Algo que aumenta su credibilidad frente al brasileño que ha cambiado hasta cinco veces su versión.

2. Datos médicos

La mujer, tras la supuesta agresión, fue atendida por una ambulancia llamada por la discoteca Sutton y trasladada al Hospital Clínic. Allí se sometió a un examen médico. El informe incluye que ella sufrió heridas derivadas de la supuesta pelea con el futbolista compatibles con este tipo de delito. Además, se hallaron restos de semen en el interior de la víctima con el mismo perfil genético que la muestra entregada por el futbolista brasileño. Alves no usó preservativo. Uno de sus primeros gestos de la víctima ante los Mossos fue señalarse rápidamente la rodilla, donde tenía una herida que el informe médico recogió subrayando que se trata de un tipo de lesión que suele ser habitual en las agresiones sexuales.

3. El tatuaje

La víctima reconoció uno de los tatuajes del brasileño en su abdomen. Según fuentes judiciales, la víctima describió el tatuaje en forma de media luna que el lateral derecho tiene en una parte de su abdomen. También en esto el futbolista dio varias versiones diferentes. En la primera de ellas, el brasileño reconoció tener ese tatuaje, pero en su versión señalaba que fue la joven la que se abalanzó sobre él mientras se encontraba sentado en el retrete. La juez desmontó de forma inmediata esa declaración al señalar como evidente que al estar sentado, al futbolista nunca se le podría haber visto dicho tatuaje. Posteriormente el futbolista cambió, una vez más, la versión de los hechos. En esta segunda declaración, Dani Alves declaró que la víctima no se lanzó hacia él, sino que, fue el brasileño el que se levantó, facilitando así la visión de su tatuaje.

4. El vestido de la mujer

La mujer fue a presentar una denuncia contra Alves dos días después del hecho. Contó lo ocurrido y entregó el informe médico. También entregó el vestido que llevaba puesto la noche de la supuesta agresión sexual. Los investigadores de la UCAS procedieron a su análisis y hallaron restos de semen del brasileño.

5. Cámaras

Uno de los primeros controles realizados por UCAS fue revisar las imágenes de la cámara de seguridad en el club nocturno Sutton. Según el relato de la víctima, Alves insistió en que lo siguiera. Luego entró al baño, donde no hay cámaras. Y las grabaciones no contradicen su versión. Aunque las primeras versiones aseguraban que Alves y la mujer habrían estado 47 segundos en el baño, es decir, que entraron y salieron. Poco después se demostró que ambos estuvieron dentro de ese baño alrededor de 15 minutos.

6. Las versiones de Dani Alves

Alves envió un vídeo a un programa de Antena 3 una semana después de los hechos en el que negaba la agresión e insinuaba que había ido al baño y se había topado accidentalmente con la víctima, que estaba dentro. A partir de ahí cambió su versión hasta en cuatro ocasiones más. Acorralado por las pruebas fue cambiado su relato. Empezó asegurando que no conocía a la chica, luego reconoció que sí, en una tercera versión afirmó que fue la chica la que se abalanzó sobre él y finalmente también dijo que mantuvieron relaciones sexuales de manera consentida y mintió para ocultar su infidelidad. Estos giros ha menoscabado y mucho su credibilidad.

7. Los testigos

El informe que la UCAS entregó al juez incluye las grabaciones de las cámaras de seguridad y también las versiones ofrecidas por testigos que estaban con Alves y la víctima. El jugador estaba con un amigo, y la joven con dos amigos. También hay explicaciones del camarero que, a petición de ellas de ellas, animó a las mujeres a sentarse con Alves y su amigo en la sala VIP. Además, según adelanta “la Vanguardia” otra testigo complica la situación de Alves. Una de las dos jóvenes que acompañaba a la víctima en la discoteca Sutton declaró a los Mossos d’Esquadra que Dani Alves se propasó antes con ella, que la manoseó con violencia, puso la mano en sus zonas íntimas y que hasta en dos ocasiones le advirtió que cesara. La versión de la acompañante coincide con la de la denunciante, que declaró a los Mossos que “me di cuenta de cómo tocaba a mis amigas y de lo pegado que estaba a ellas”.

8. Restos biológicos

Una víctima de agresión sexual siempre debe acudir al hospital después del hecho. Aunque es muy difícil, debes hacerlo sin cambiarte de ropa, ducharte o ir al baño, como hizo el denunciante. Podría ser la clave para identificar al agresor porque en el reconocimiento médico, que en Barcelona se realiza siempre en el Hospital Clínic, se pueden encontrar rastros de ADN en los fluidos o el cabello del agresor y así saber quién es. En el caso de Alves, la rapidez con la que se actuó fue clave para preservar los restos biológicos tanto en la joven como en el baño. Gracias al precinto del habitáculo pudieron recogerse huellas dactilares y restos biológicos claves para la acusación. 

9. El demoledor informe psicológico

El Ministerio Público presentará ante la Justicia un escrito desgarrador en el que se detalla, con pelos y señales, el episodio de "angustia y terror". Por medio de ese documento se han conocido presuntos detalles aún desconocidos de la "actitud despectiva y violenta" de Alves y como lo vivió la víctima que asegura que llegó a faltarle el aire. La víctima está todavía de baja laboral. Ha pasado un año y todavía no ha podido superar el trauma que le supuso la acción de Dani Alves. La fiscalía detalla en su escrito de acusación que, según el informa psiquiátrico forense, la mujer presenta sintomatología de tipo ansiosa depresiva con somatizaciones, compatible con un trastorno secundario a "un hecho estresante o traumático". Los facultativos concretan que su intensidad "globalmente es elevada", con "repercusión funcional a nivel laboral y social". El estrés "ambiental" posterior, indicen, actuó como potenciador de esta situación. La afectación psíquica se extiende a "las áreas personal, socio familiar y de salud física y mental". Los informes periciales recalcan que la joven sufre en la actualidad un "trastorno de estrés postraumático" importante.

10. La última baza de la defensa

Que el jugador estaba borracho y no era consciente de los hechos es la última baza de la defensa del brasileño que tratarán de demostrar ante el juez. La defensa del jugador brasileño, que ejerce la abogada Inés Guardiola, aduce que el estado de embriaguez de Alves mermaba sus capacidades cognitivas, de forma que no era consciente de sus actos. Algo que puede ser considerado un atenuante que rebajaría la pena. Para apuntalar esta estrategia su defensa presentará los tickets de consumición y las llamadas que realizó a su esposa Joana Sanz - que será llamada a declarar- asegurando que estaba borracho. Pero además, durante la investigación Mossos d'Esquadra hablaron con varios testigos que aseguraron que muy bien no iba esa noche. Luego ninguno de ellos quiso ratificar esa declaración que en comisaría. Unos testigos a los que tratará de encontrar su equipo legal y que podrían ratificar lo que presumiblemente declarará su todavía esposa Joana Sanz. La canaria, uno de los pocos apoyos que le quedan al brasileño, se convierte así en el eje de su defensa y deberá corroborar con su declaración que llegó a casa en un estado de embriaguez considerable. Una prueba vital que puede jugar a su favor a la hora de determinar su futuro penal.