Kepa, no; Keylor resiste

El costarricense estuvo muy cerca de salir del Madrid tras su primera temporada como suplente de Casillas, pero el intercambio con De Gea no se finalizó y desde entonces ha ganado ocho títulos.

A sólo 11 partidos pudo reducirse la historia de Keylor en el Real Madrid, pero después de regatear al destino en varias ocasiones, el próximo encuentro que dispute será el número 119. A pesar de las dudas, Navas resiste y lo seguirá haciendo al menos hasta el mes de mayo, porque las opciones de que llegue un portero se han ido desvaneciendo según avanzaban los días en los que el mercado de invierno está abierto. No hace mucho parecía inevitable que Kepa firmase su contrato este enero, después todo se complicó con su lesión y, especialmente, con el empeño de Zidane de no meter a nadie nuevo en el vestuario. Ayer se confirmó oficialmente lo que ya se sabía en la última semana: que Arrizabalaga renovaba su relación con el Athletic Club hasta 2025 con una cláusula de rescisión de 80 millones. «Ha habido propuestas, pero considero que la mejor para mí era seguir en el Athletic durante mucho tiempo y estoy muy feliz», confesaba el guardameta, que casi había imaginado ya su presentación en el palco de honor del Santiago Bernabéu uno de estos días.

No llegará Kepa como el último día de agosto de 2015 tampoco lo hizo De Gea, en aquella noche en la que el famoso fax se quedó en el limbo. Tanto entonces como ahora, Keylor vio desde fuera unos movimientos que le afectaban de forma directa. El intercambio de porteros con el United estaba acordado y Navas reconoció más adelante que no llegó a subirse al avión camino de Mánchester, pero que «lo vio muy cerquita». Si el fax hubiese entrado a tiempo en la sede de LaLiga, habría dejado el Real Madrid tras una única temporada en la que cumplió perfectamente el papel de suplente de Casillas. Después, el mito se fue a Oporto y, por muy poco, el «tico» pudo quedarse sin saber lo que era ser el titular de la portería blanca. El destino quiso que aquello no pasara y lo que sí hizo fue conquistar su primera Copa de Europa y firmar un curso muy notable. Ahí se ganó la confianza de Zidane, que le sigue apoyando a muerte junto con Lluís Llopis, preparador de porteros y el gran valedor del costarricense tanto ahora como en sus tiempos en el Levante. El técnico se ha empeñado, pública y privadamente, en no recomponer la plantilla a mitad de temporada. «Nada, nada, no vamos a fichar y no creo que el club y yo tengamos una opinión distinta en este asunto», insistía Zizou antes del partido contra el Deportivo. «Mi portero es Keylor», había dicho también. El francés va a morir o resurgir con los mismos que han ganado las dos Supercopas y el Mundial de Clubes. Considera que lo mejor es mantenerse al lado de sus chicos, a los que rescató mentalmente a su llegada y que ven en la confianza del entrenador la mejor vitamina para pasar este mal momento. «Somos una piña y tenemos que demostrar lo que somos. La solución está en nosotros», repite una y otra vez Zizou, para el que las únicas opciones en la portería ahora mismo son Navas en Liga y Champions y Casilla en el camino hacia la Copa del Rey.

A Keylor lo sostuvo incluso en los peores momentos del curso pasado, cuando algunas voces pedían la titularidad de Kiko. No cambió Zidane y tuvo recompensa en la final de Cardiff, un choque que cambió Navas con una magnífica parada a Pjianic todavía con el marcador igualado. Su segunda parte de temporada fue magnífica y por eso no hubo ningún debate el verano pasado sobre si había que reforzar la portería. Con el paso de los meses el club tuvo claro que a medio plazo es un movimiento que había que hacer y fue cuando Kepa entró en escena. Estuvo casi fichado y ahora se ha descartado, algo que nunca ha sucedido con la opción de David de Gea.

Como adelantó LA RAZÓN en su edición del pasado sábado, el guardameta del United todavía espera al Real Madrid y no ha querido ampliar de momento el contrato que le une a los «red devils» hasta 2019, a pesar de una oferta cercana a los 400.000 euros semanales. El ex del Atlético sabe que en el mercado del próximo verano la directiva blanca va a contratar al menos un portero y no quiere cerrarse esa puerta que estuvo a punto de cruzar y con la que sueña. Los próximos seis meses, como mínimo, son de Keylor, que vuelve a resistir.