Champions League
La morbosa visita en el palco de Montjuïc 25 años después del cochinillo
Luis Figo ha presenciado el partido entre Barcelona y PSG en calidad de asesor de la UEFA. "Siempre es un placer volver aquí", dice
Ha habido dos visitas muy distintas este miércoles en Montjuïc. Luis Enrique regresaba a la que fue su casa al frente del PSG campeón de Europa. En la previa se reconoció como hincha del Barça, socio culé y admirador del juego que hacen los de Hansi Flick. Es muy querido en Barcelona, todo lo contrario que el invitado que vio el choque desde el palco del estadio Olímpico y que llevaba 25 años sin ir por allí, desde que en el año 2000 fichó por el Real Madrid.
"Siempre es un placer volver a Barcelona", dijo Luis Figo, que estuvo presente en calidad de embajador de la UEFA, acompañando a su presidente, Alexander Ceferin. "He tenido la suerte de poder asistir a un partidazo. He visto a algún viejo conocido, si te digo la verdad", dijo el portugués en los micrófonos de Movistar en el descanso. No hay una visita con tanto morbo como la suya, desde que era ídolo azulgrana y se marchó al Real Madrid de la mano de Florentino Pérez, que prometió su fichaje si ganaba las elecciones. La cabeza de cochinillo que le lanzaron la primera vez que volvió como futbolista blanco al Camp Nou es una de las imágenes icónicas de la historia de la Liga.
Ayer fue todo mucho más tranquilo, más allá de que evidentemente no fue bienvenido por los que lo reconocieron en los accesos. "Figo es miembro de la junta de UEFA y es absolutamente respetable. Ha sido jugador del Barça, recordamos las tardes y noches de gloria que nos dio. Luego él tomó una decisión y la vida continúa. Será recibido con todo el respeto que corresponde", confesaba Joan Laporta después de la comida de directivas previa al partido.