Los jugadores que quedan marcados para Zidane en el Real Madrid

El Real Madrid sólo perdió por un gol en el campo del Rayo Vallecano, pero lo peor fue la imagen, la de un equipo que ya se ha dejado llevar y algunos futbolistas incapaces de hacer frente a estos encuentros sin nada que disputarse. De ahí el enfado de Zidane, como nunca se había visto después de un encuentro.

Sin objetivos, a los jugadores que en los últimos años a estas alturas competían por ser los mejores de Europa y que se han quedado sin nada que hacer, sólo esperar a que pasen los partidos, acabe la temporada y se decida el futuro de muchos. Motivarlos es muy duro y si los partidos se ponen del revés, no tienen fuerza, ni puede que ganas, para darles la vuelta.

Sin gol es muy complicado ganar los partidos. Durante el mes de abril, sólo Benzema ha marcado en el Real Madrid, lo que define cómo esta el equipo cuando llega al área contrario. Se ha quedado sin pólvora sin remedio. Zidane confío en Mariano, pero el delantero, siempre excitado, no ha dado lo que se esperaba. Tampoco ha tenido continuidad. Por eso ya ha dicho el entrenador que la temporada que viene sí que se van a reforzar.

Jugadores que saben que no van a continuar y a los que les cuesta mucho centrarse en el día a día. Ceballos y Llorente pasaron a ser titulares después de varios partidos sin entrar en la convocatoria. Saben que su futuro en el equipo blanco está complicado, porque Zidane tiene otros planes. Ceballos no ha terminado de explotar, sin ser decisivo cerca del área, mientras que Marcos Llorente no ha tenido suerte esta temporada.

Gareth Bale ha colmado la paciencia de Zidane. Le preguntaron si le veía centrado en el equipo y con su enfado a cuestas, el entrenador dijo que se lo preguntansen a él. No fue el peor del equipo en Vallecas, pero su actitud, casi siempre desconectado, no dice mucho a su favor.

Los consagrados, agotados. Las señales que da Marcelo son preocupantes. Zidane le ha dado muchos minutos, pero apenas ha hecho partidos buenos. Lo mejor contra el Athletic. En Vallecas se volvió a ver que le cuesta atacar y volver. Modric se caía y Kroos lleva una temporada en la que no parece querer implicarse. Da la sensación de que están cerrando un ciclo.

Desorden final. Varane acabó jugando de delantero centro sin que el equipo lo notara porque fue incapaz de generar ocasiones, más allá de los arreones de Brahim o el empuje de Carvajal