En Qatar, lo que diga Max Verstappen

Ya está todo preparado en Qatar para que Max Verstappen sume su tercer título mundial de F-1. El domingo saldrá desde el primer puesto de la parrilla, pero el sábado con ser sexto en la Carrera Sprint y sumar los correspondientes tres puntos, el neerlandés sumará una nueva corona. Incluso siendo octavo, si el Checo Pérez es tercero también sería campeón. Este curso, Red Bull y Max Verstappen han dominado con una autoridad indiscutible, de principio a fin, sin contemplaciones. Faltan seis carreras para completar el calendario y sólo Carlos Sainz y Ferrari han podido sumar un triunfo. Es la única victoria no Red Bull del año. Si el mejor piloto tiene el mejor coche... Su compañero, Sergio Pérez, cuenta con el mismo material, el mismo monoplaza... y es segundo con una diferencia abismal en puntos y en rendimiento con su compañero.

Verstappen es uno de esos pilotos geniales y sólidos que salen de vez en cuando y hoy puede alcanzar su tercer título para superar a algunos como Fernando Alonso y ponerse en el mismo pedestal que leyendas como Ayrton Senna o Nelson Piquet. El holandés es agresivo, metódico, exigente y un gran conocedor del coche para ponerlo a punto, aunque en este sentido el trabajo de Red Bull es intachable con su ejército de ingenieros en el circuito y en remoto desde la fábrica. Si a eso se le añade el diseño del monoplaza con el sello de Adrian Newey no hay mucho más que discutir

El primer título de Verstappen llegó hace dos años en la mítica maniobra en Abu Dabi cuando la dirección de carrera decretó una neutralización a dos vueltas del final. El adelantamiento a Hamilton fue imponente y desde entonces el holandés no ha tenido rival. Tal es su rendimiento, que Red Bull tuvo que asumir una renovación de 40 millones de euros anuales para mantenerle en sus filas. Algo que van en contra de su política de sueldos, que ni de lejos contemplaba algo así, entre otras cosas, por la existencia de la Academia de pilotos que busca jóvenes talentos y que últimamente no ha tenido grandes resultados. Tendrán que pasar varias generaciones de pilotos para poder encontrar a otros del nivel de Vettel o Verstappen.

Verstappen se puede convertir en el primer piloto que se proclama campeón en la nueva modalidad de Carrera Sprint. Una de las grandes apuestas de los nuevos gestores estadounidenses del Mundial va a cobrar hoy todo el protagonismo que buscaban los organizadores. La intención es que el Sprint esté implantado en todas las carreras en menos de tres años.

Con el título de Verstappen, Red Bull tiene que manejar qué piloto le acompaña la próxima temporada y si apuesta por un compañero más competitivo. Red Bull sabe que puede mantener su superioridad técnica, pero puede que esté buscando un piloto capaz de hacer frente a su campeón. Sería una forma de aumentar el espectáculo y dar más valor todavía a la marca Red Bull. Algo parecido a lo que vivieron en los 80 y 90 equipos como McLaren y Williams, que protagonizaron una temporada aburrida salvada gracias a la rivalidad entre compañeros. Fueron años en los que la F-1 vivió momentos épicos con Prost o Senna y Piquet y Mansell.