Fórmula Uno

Todas las razones que convierten lo de Alonso y Red Bull en un matrimonio imposible

Los rumores sobre la posible llegada del piloto español a la escudería austriaca carecen de fundamento. Verstappen respeta al asturiano, pero jamás permitiría su fichaje

Max Verstappen y Fernando Alonso, en un gran premio reciente
Max Verstappen y Fernando Alonso, en un gran premio recienteInstagram

Desde hace semanas las redes sociales han enloquecido con un hipotético fichaje de Fernando Alonso por Red Bull. Pura ciencia ficción, rumores sin fundamento... redes sociales. El pobre rendimiento del compañero de Max Verstappen, Sergio Pérez, y la ansiada sustitución por parte de la legión de seguidores de Alonso dentro y fuera de España, llevaron a muchos a dar por bueno el rumor sobre el asturiano y su posible aterrizaje en la escudería energética como compañero del ya tricampeón del mundo.

La mecha la encendió este verano el responsable del equipo, Helmut Marko, un austriaco con mucho conocimiento del mundo del automovilismo que fue la persona a la que el propietario de la compañía Red Bull, Dietrich Mateschitz, puso al mando de la estructura de F-1. Marko afirmó en una entrevista que actualmente sólo veía a Fernando Alonso como el único capaz de batir a su piloto. En ningún momento dijo ni insinuó nada sobre la posibilidad de compartir box. Meter a dos gallos en el mismo corral es una opción inviable en la F-1.

La experiencia habla de situaciones incómodas, hace peligrar la imagen de la escudería y el deseo de algunos aficionados no puede estar más lejos de la realidad. Los responsables de las escuderías ni se plantean una operación similar. Ganar es el objetivo y, aunque hay que tener la mejor dupla de pilotos posibles, nadie quiere guerras internas.

Un hipotético equipo formado por Alonso y Verstappen sería histórico, pero no va a suceder. Simplemente no entra en el espíritu y la filosofía que siempre ha aplicado la escudería energética. Su programa de jóvenes pilotos, que últimamente va de fracaso en fracaso, no tiene una figura clara que pueda tomar el papel de Verstappen, que además es muy joven todavía y salió de esta misma academia.

El holandés logró el pasado año una renovación de contrato muy jugosa con 40 millones de euros al año y cláusulas como tener voz y voto en la elección de su compañero de equipo. Algo habitual en campeones de otras épocas como Schumacher, Senna o Prost, que tenían mucho que decir a la hora de elegir colega de escudería.

Verstappen sabe que tener al lado a Alonso aumentaría muchos puntos el nivel de exigencia y que, con mucha probabilidad, podría ganarle muchas batallas a pesar de sus 42 años. Una quimera.

Red Bull ha confirmado que Pérez seguirá y Aston Martin ha hecho lo propio con Alonso para 2024. Los únicos que han podido ejercer cierta presión son los promotores americanos de la F-1. El reglamento técnico creado por ellos no ha surtido el efecto deseado. Red Bull domina por completo y eso ha traído cierto aburrimiento. Por eso, meter a dos pilotos como Verstappen y Alonso en el mismo equipo sería el revulsivo de espectáculo que necesita ahora el Mundial, a pesar de vivir una de sus mejores etapas en cuanto a popularidad. Sería algo así como intentar repetir los duelos que en su momento vivieron dentro del mismo equipo Senna y Prost, Mansell y Piquet, Prost y Lauda, Hamilton y Rosberg, Hamilton y Alonso... pero de eso nada.

Ningún dirigente de Red Bull, teniendo a Verstappen como cabeza de cartel, quiere arriesgar y optan por un esquema de equipo convencional con una gran estrella, el neerlandés, y otro piloto rápido, capaz de pelear y traer muchos puntos, pero sin alcanzar el nivel del compañero.

Además, desde Red Bull no quieren pilotos con demasiada edad por una cuestión comercial. Sólo jóvenes y si proceden de su cantera, mucho mejor. Pérez es la excepción y le ficharon por no tener en aquel momento un relevo claro que acompañara a Verstappen hace tres años. El mexicano ayudó a su compañero a ganar el título, sobre todo, en aquella mágica carrera de Abu Dabi en 2021 en la que el propio Max lo llamó por radio «leyenda» por su defensa con Hamilton haciendo perder tiempo al de Mercedes. Pero aquel Pérez no es el de hoy. En 2023 ha cometido muchos errores y el subcampeonato corre peligro. Aún con eso, lo de Alonso con Red Bull es un matrimonio inviable.

Manda Verstappen

Al margen de la carrera Sprint del sábado, el orden de salida para el Gran Premio de Brasil no deparó sorpresas. La amenaza de lluvia fue constante y en la definitiva Q3 los pilotos sólo pudieron completa un único y decisivo giro antes del diluvio. Verstappen, Leclerc, Stroll y Alonso fueron los más «listos» por delante de Hamilton, Russell, Norris y Sainz.