Copa del Rey de Baloncesto

Una Décima que vale un título

El escolta del Real Madrid Sergio Llull con el trofeo de Copa entre sus manos.
El escolta del Real Madrid Sergio Llull con el trofeo de Copa entre sus manos.larazon

El Madrid gana la Copa con una canasta de Llull en el último segundo. Domina el palmarés con 24.

Málaga- Llull y Mirotic se abrazaban extasiados en el centro de la pista ajenos a todo lo que sucedía a su alrededor. El ala-pívot besaba la cabeza de su compañero como si fuese lo último que pudiera hacer en la vida. La ocasión lo merecía. Llull acababa de anotar una canasta desde la esquina a falta de una décima que convierte al Real Madrid en el nuevo rey de Copas. Su título número 24, por los 23 del Barça, no pudo llegar en un final más dramático. Con el Barcelona medio muerto apenas dos minutos antes, los azulgrana resucitaron, remontaron siete puntos y se pusieron por delante a falta de 8.8, pero... apareció Llull a seis metros del aro para anotar y que el título volara a Madrid. Florentino saltaba en el palco y aplaudía entusiasmado; Bartomeu se quedaba sin su primer trofeo en su primera final; los jugadores blancos enloquecían en el centro de la pista y la mayoría del pabellón, la amplia mayoría, presumía de madridismo.

Ése es el otro título que puede enseñar el Madrid de Pablo Laso tras su paso por Málaga. Para los que van más allá de los resultados quizá sea tan importante como la propia Copa del Rey. «Antes no nos seguían tantos aficionados, aquí hay muchos más que otros años. Tenemos la mejor afición de Europa», presumía Reyes. El estilo atrevido, divertido y descarado del Madrid no fue esta vez la poción mágica para ganar el título. Debió adaptarse al guión que marcó el Barça. El equipo desbocado de otras tardes, el de las transiciones de vértigo que anotaba en los primeros segundos de cada posesión no pudo aparecer. O no le dejaron. El Barcelona, o al menos eso entiende su cuerpo técnico, necesita un ritmo diferente para poder ganar al Madrid. Y estuvo muy, muy cerca de hacerlo. Durante muchos tramos de la final, los centímetros del juego interior azulgrana pudieron con la intensidad del Real Madrid. El talento de los exteriores blancos vivió maniatado salvo apuntes excepcionales que casi siempre llegaron de la mano de Rudy o de Mirotic.

La resolución de la final fue la adecuada para un partido que se movió siempre en el alambre. Nadie logró despegarse hasta los últimos minutos. Las diferencias máximas no fueron más allá de los cuatro puntos y el partido, salvo en el tramo final, se movió en el tempo que marcó el Barça. Al Madrid no le quedó otra que adaptarse a un escenario muy poco familiar. El daño que los centímetros de Tomic y Lorbek hacían por dentro contrastaba con la nula presencia de Navarro. Tres puntos en la primera parte; cinco al final... Pocas veces fue tan intrascendente en un día tan grande. Rudy sí pudo ejercer su papel. Llegó al torneo con el colmillo afilado y sólo la extraordinaria aportación de Mirotic en la final le apartó del MVP. A los primeros tirones serios del Madrid, el Barça opuso a Huertas. El base sostuvo a los suyos en el tercer cuarto hasta que Laso dio con el quinteto adecuado. Sergio, Llull, Rudy, Mirotic y Reyes. El base supo leer el partido. Consciente de que la brillantez era cosa de otras tardes, se dedicó a dirigir y a trabajar sobre Navarro. Con dos pívots de mentira, el Madrid dejó de sentirse inferior por dentro y llegó el despegue. Con el desarrollo del partido, siete puntos eran un abismo (64-71 y 68-75), pero el Barça fue capaz de levantarse gracias a Oleson y Huertas. Se puso por delante (76-75), aunque restaba tiempo suficiente para que el Madrid arreglase lo que había dejado escapar en dos minutos. En 8,8 segundos, la frialdad de Sergio y la puntería de Llull hicieron el resto. «Fue un error defensivo nuestro clarísimo», dijo Pascual. Sergio penetró, vio libre a Llull y la Copa del Rey número 24 ya está en el Bernabéu.

Ficha técnica

FC Barcelona (17+25+17+17): Huertas (15), Navarro (5), Papanikolaou (2), Lorbek (8), Tomic (14)-cinco inicial- Dorsey (7), Sada (0), Abrines (7), Oleson (11), Nachbar (7) y Pullen (0).

Real Madrid (16+22+22+17): Llull (9), Rudy Fernández (19), Darden (2), Mirotic (17), Bourousis (2) -cinco inicial-, Draper (5), Reyes (9), Rodriguez (8), Carroll (2) y Slaughter (4).

Árbitros: Hierrezuelo, García González y Conde. Señalaron falta técnica a Slaughter y a Tomic, en el minuto 29. Eliminado por cinco faltas personales Reyes, minuto 40.

Incidencias: Partido correspondiente a la final de la Copa del Rey disputada en el Palacio de los Deportes Martín Carpena, de Málaga, ante 11.000 espectadores. Mirotic fue el "Jugador Más Valorado de la Final".