Morata, ahora o nunca

Sin Bale ni Ronaldo y sin ganas de arriesgar con Benzema, el canterano se convierte en la referencia del Madrid en la Supercopa. Es su gran oportunidad para pelear por minutos

El mismo día que el Madrid hacía oficial el traspaso (con derecho de tanteo) de Jesé al PSG, Morata se preparaba para ser hoy la principal referencia en el ataque del equipo blanco en el primer día grande de la temporada. Hace años, ambos futbolistas centraban casi todas las esperanzas de la cantera, pese a que no pueden ser más distintos. Álvaro era el ejemplo del futbolista que lo consigue todo gracias a su esfuerzo y su insistencia, tranquilo, que no llama la atención, mientras que Jesé ha sido todo lo contrario: el talento descomunal del que se ve venir su estrellato y también una persona extravagante, con una personalidad que no es fácil de controlar. Todo apuntaba a que era éste quien iba a llegar al primer equipo y así parecía hace dos años, cuando adelantó a Morata con Ancelotti en el banquillo. Pero una lesión y el crecimiento de Álvaro en la Juve, han dado la vuelta a las expectativas. Hoy, el partido de la Supercopa contra el Sevilla es la confirmación de que ahora mismo el trabajo de Morata ha «vencido» al talento de Jesé. «Para él, igual que para mí, la Juve ha sido un club importante en su carrera –aseguraba ayer Zidane–. Es un lugar bueno para crecer y él ha crecido muchísimo. Está bien, está preparándose, trabaja mucho y escucha. Eso es lo importante. Está preparado para el reto y la temporada que viene, que va a ser muy dura», continuaba Zidane, que ha sido uno de los valedores para que Morata se quede.

La temporada del Madrid y la del Sevilla empiezan antes que ninguna y, además, el campeón de Europa se irá en diciembre a Japón para disputar el Mundialito de clubes. Va a haber minutos para todos esta temporada y por eso Zidane quería a Morata a su lado. Por si se lesionan sus estrellas. Morata decidió quedarse, pese a que era uno de los nombres más apetitosos del mercado y, aunque va a tener minutos, sabe que va a ser complicado que dispute los partidos trascendentales. En su primer día, Zidane dejó claro que los tres de arriba son intocables.

Pero hoy, sin Bale ni Ronaldo y con Benzema sin minutos de pretemporada por su lesión («Está bien, no jugó los últimos partidos, no vamos a arriesgar», explicó Zidane»), todas las miradas apuntan a Morata, que terminó la pretemporada sin gol. Ha llegado su momento, el que tanto peleó cuando dejó la cantera del Atlético y se fue a la del Getafe. Ahí se fijó el Madrid en él y lo fichó para su juvenil. Era alto, tenía gol, y capacidad para jugar con la pelota. Pero sobre todo, se veía que no iba a dejar pasar una oportunidad. Como la de hoy.