Economía

El gas, la nueva guerra de Trump en Europa

US President Trump signs National Defense Authorization Act for Fiscal Year 2020
US President Trump signs National Defense Authorization Act for Fiscal Year 2020ERIK S. LESSEREFE

Media Europa respiró tranquila cuando el viernes Rusia y Ucrania firmaron un acuerdo para prorrogar el tránsito de gas a través de territorio ucraniano con destino a los consumidores europeos. Pero la celebración de los hogares centroeuropeos, que evitarían así las restricciones en mitad del crudo invierno, se tornó preocupación cuando el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció ayer sanciones contra el gasoducto Nord Stream2, el nuevo enlace que suminitrará este combustible.

El Gobierno alemán lamentó la implementación de estas sanciones y ratificó su rechazo a tales medidas «extraterritoriales, que afectan a empresas y europeas y suponen una injerencia en nuestros asuntos internos», apuntó un portavoz del Ejecutivo de la canciller Angela Merkel. En un comunicado, el Gobierno germano mostró su «extrañeza» ante el argumento de EE UU de que tales sanciones están destinadas a «proteger» a Ucrania y alude a los avances logrados en las negociaciones entre Moscú y Kiev, con intervención de la Comisión Europea y Alemania.

Trump firmó el viernes las sanciones, aprobadas el pasado martes por el Congreso de EE UU. Su objetivo es el gasoducto que transportará directamente gas ruso a Alemania por el fondo del mar Báltico y eludirá el tránsito por Ucrania y Polonia. Un 90 % de sus 1.255 kilómetros de longitud están ya construidos y su coste se estima en más de 10.000 millones de euros.