Agricultura
La hora de Sánchez
La opinión de César Lumbreras
Ha llegado la hora de Pedro Sánchez, primero, y de Luis Planas, después. Y no tienen escapatoria. En principio, esta semana que acaba de comenzar será clave para los intereses del sector agrario español. Los jefes de Estado y de Gobierno de la UE se reúnen de manera presencial en Bruselas con el objetivo de llegar a un acuerdo sobre el Marco Presupuestario 2021-27, del que depende el dinero destinado a la PAC, y también el llamado Fondo de Recuperación, que se pretende poner en marcha para sacar a la economía europea de la crisis provocada por el coronavirus, y que estaría dotado con 750.000 millones de euros. De acuerdo con la propuesta de la Comisión Europea, el campo europeo solo se llevaría 15.000 millones de esa cantidad, lo que supone tan solo el 2 por ciento del total. En consecuencia, lo más importante, desde el punto de vista del sector agrario, es lo que suceda con el Marco Presupuestario.
El objetivo que se ha autoimpuesto el Gobierno español, repetido hasta la saciedad por Sánchez y, sobre todo por Planas, es, primero, que no se reduzca el dinero destinado a financiar la PAC en relación con las cifras actuales y, en segundo lugar, que tampoco se recorten los fondos que llegan a España por esta vía. En conclusión, si como resultado de la negociación, las cifras globales de la PAC y las correspondientes a España sufren sendos tajos, habrá que hablar de otro estrepitoso fracaso de Sánchez y de su Gobierno en el contexto de la UE, que se sumaría al cosechado días atrás con motivo de las aspiraciones de Nadia Calviño a presidir el Eurogrupo.
Por cierto, cuando se cierre este proceso negociador, el sector agrario no debería olvidar que la vicepresidenta española y ministra de Economía, en su calidad de directora general de Presupuesto de la Comisión Europea, fue la autora de las propuestas iniciales en las que se daba un importante «tajo» al dinero de la PAC, que luego se suavizó en la propuesta final que presentó el Colegio de Comisarios. En cualquier caso, los representantes alemanes, encabezados por Merkel, quieren llegar un acuerdo en la reunión de esta semana ya que el tiempo apremia.
Sánchez se juega mucho en este envite, uno de los retos más importantes a los que deberá enfrentarse durante su mandato. El problema es que también nos jugamos mucho los españoles, que estamos en sus manos.
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