Banca

La banca española pasa de perder 11.531 millones a ganar 7.190 en el primer semestre de 2021

Se trata de la rentabilidad más elevada de los últimos diez trimestres

Jose María Roldán, presidente de la Asociación Española de Banca (AEB)
Jose María Roldán, presidente de la Asociación Española de Banca (AEB)APIEAPIE

Los bancos españoles lograron un beneficio de 7.190 millones de euros hasta el pasado mes de junio, lo que supone la rentabilidad más elevada de los últimos diez meses, según datos facilitados por la Asociación Española de Banca (AEB). En 2020, las entidades bancarias sufrieron unas pérdidas de 11.531 millones, consecuencia de las provisiones y saneamientos que realizaron con el objetivo de anticiparse a los posibles efectos de la pandemia de la COVID-19.

Entre enero y marzo de este año, el nivel de dotaciones y provisiones realizadas descendió un 36% y volvió a niveles anteriores a la llegada del coronavirus, llegando hasta los 9.062 millones de euros. Esto implica 5.098 millones de euros menos que las provisiones extraordinarias realizadas durante el mismo periodo del ejercicio anterior. Debido a la caída del margen de intereses, que no pudo ser compensada por la mínima mejora de los ingresos netos por comisiones ni de los resultados por operaciones financieras netos de diferencias de cambio, el margen bruto se redujo un 3,1% en el primer trimestre del año. No obstante, la ratio de eficacia creció más de un punto en el año, y gracias al recorte de gastos de explotación en un 6%, llegó hasta el 47,7%. Los menores gastos por impuestos y la ausencia de saneamientos situaron el resultado consolidado del ejercicio en 8.440 millones de euros.

Fondos propios, mejora de la rentabilidad y reducción del balance

En cuanto a la rentabilidad sobre los fondos propios (ROE), subió ligeramente por encima del 7%. Esto supone la ratio más elevada de los últimos diez trimestres. La ratio de capital de máxima calidad (CET1), por su parte, se situó en el 12,5%, 83 puntos básicos por encima de la registrada hace un año.

Según la AEB, el balance consolidado de las entidades españolas ascendió hasta los 2,7 billones el 30 de junio, lo que supone un 2,6% menos que un año antes. Esto se debe, en parte, al efecto perímetro tras la venta que realizó BBVA de su filial en Estados Unidos, y a la disminución de la actividad de negociación con derivados.

El crédito otorgado a la clientela disminuyó un 2,7 %, con una ratio de morosidad del 3,7 %, tres puntos básicos inferior a la de un año antes, y un nivel de cobertura del 71,9 % de los activos dudosos, frente al 72,9 % de junio de 2020. Los depósitos de la clientela avanzaron un 0,3% anual y situaron la ratio de préstamos sobre depósitos en el 102%, cuatro puntos porcentuales menos que un año antes. En términos agregados, la suma de los saldos con bancos centrales y entidades de crédito continúa presentando una posición neta prestamista por más de 64.000 millones de euros.