Infraestructuras

La ampliación de la zona protegida de El Prat solivianta a los agricultores

Defienden que el crecimiento del aeropuerto es posible sin afectar a la zona agraria y rectificando el plan

Un avión vuela por el espacio protegido de la Ricarda, en El Prat de Llobregat
Un avión vuela por el espacio protegido de la Ricarda, en El Prat de LlobregatKike RincónEuropa Press

Los incumplimientos de la administración –Generalitat y Gobierno– del Plan Ambiental de la ampliación del aeropuerto de 2006 han provocado la reacción la Unión Europea que ha remitido una Carta de Emplazamiento a las autoridades españolas para que rectifiquen los errores y contradicciones. Como respuesta a las exigencias europeas, la Generalitat prepara una ampliación de la ZEPA –Zona de especial protección de Aves– en 1.000 hectáreas lo que dejaría en la ruina a la empresa agroalimentaria del Bajo Llobregat.

El Instituto Agrícola Catalán de San Isidro ha iniciado una campaña a la que se han adherido más de 150 empresarios agroalimentarios del Bajo Llobregat, remitiendo de forma individualizada una misiva a la consejera de Acción Climática, Agricultura y Alimentación, Teresa Jordà, en la que rechazan esta ampliación de la zona ZEPA a costa del territorio agrícola porque «será la ruina para la economía del Bajo Llobregat, ahuyentará inversiones y será el fin del hub agroalimentario de la comarca, desapareciendo buena parte de las empresas, que representa la agricultura de proximidad que abastece a diario a Mercabarna», afirma el presidente de la patronal agroalimentaria catalana, Baldiri Ros.

La Carta de Emplazamiento de la Comisión Europea, a la que ha tenido acceso LA RAZÓN, reclama la renaturalización de las 7 hectáreas de los aparcamientos construidos sin la declaración de impacto, la rehabilitación del corredor ecológico y la inclusión efectiva de la zona de Ca l’Arana y la desembocadura del Llobregat en la ampliación de 2006, no incluidas por la Generalitat, y la elaboración de un nuevo Plan de Impacto Ambiental. El sector agrario, que secunda en más de un 70% la iniciativa del patronal, considera que «la Generalitat, para ocultar el fracaso de su gestión y los errores cometidos en la ejecución del Plan de 2006, quiere ampliar la zona ZEPA en mil hectáreas a costa de superficie agrícola, argumentando que es una imposición de la Comisión Europa», cuando según el documento en ningún momento apunta como solución la ampliación de la zona ZEPA a costa de terrenos agrícolas. «Es una decisión de la Generalitat, no una imposición europea», se manifiesta tajante Baldiri Ros.

Los agricultores del Bajo Llobregat han tomado la iniciativa en defensa de su hub agroalimentario gravemente amenazado por la ampliación que «arruinaría la economía de la zona y del área metropolitana por el impacto en el futuro de las infraestructuras y la pérdida del hub agroalimentario» En este sentido, Ros afirma que «no es necesaria la ampliación de la ZEPA para compensar la ampliación del aeropuerto de 2006 y se podría hacer la actual ampliación sin ampliar las ZEPAS de zona agrícola». Es decir, el empresariado agrícola cree que con la subsanación de los errores y la elaboración de un nuevo Plan Ambiental se podría ampliar el aeropuerto sin afectar el terreno agrícola.