«Cyberbots», lo último en comercio instantáneo de segunda mano para triplicar ganancias

Una pregunta siempre ha asaltado a los compradores compulsivos en la red: «¿Por qué resulta prácticamente imposible adquirir un determinado producto cuando sale a la venta? La explicación lógica puede ser que se ponen a la venta muy pocas unidades y siempre se llega tarde. Lograr esa ansiada entrada de concierto, el último modelo tecnológico, la zapatilla de moda o el juguete más buscado por todos se convierte en misión imposible. Pero, ¿por qué?, si apenas han pasado unos segundos desde que se ponen los artículos en circulación y uno se ha conectado para comprar.

Todo tiene una intrahistoria, que se completa cuando casi de inmediato aparecen en plataformas de venta de segunda mano el objeto de deseo al doble o el triple de su precio. ¿Por qué ha tenido más éxito el revendedor que uno mismo a la hora de realizar la compra cuando había disponibilidad del producto? La respuesta es sencilla y muy tecnológica. Porque la competencia ha utilizado un «cyberbot» para realizar la compra. Esto no es más que un programa informático que realiza la adquisición de un determinado artículo en el instante en que es puesto a la venta. Y para utilizarlo no se tienen que tener profundos ni especializados conocimientos informáticos.

El problema para lograr las compras más deseadas se acrecienta de cara a la Navidad y amenaza con sumarse a otros factores como la escasez de suministros y los problemas en la logística del transporte, que están afectando a la disponibilidad de algunos productos.

Netacea es una firma de ciberseguridad especializada en la detección de «bots» que ha alertado de como la proliferación de «retail bots» y «scalper bots» amenaza con llenar de tristeza miles de hogares a los que puedan llegar los regalos de Papa Noel y los Reyes Magos. Según Matt Gracey-McMinn, jefe de Investigación de Amenazas de Netacea, hay productos con una demanda tan alta que resulta imposible comprarlos sin la ayuda de uno de estos «bots». Algunos ejemplos que cita son juguetes de Lego como «Creator Winter Village Cottage set» cuyo precio de venta 105 euros y puede adquirirse en plataformas de reventa por 364 euros. O las deportivas Air Jordan Retro que parten de un precio de 100 euros y pueden encontrarse en torno a los 750 en varias plataformas.

Hay tres tipos de compradores que usan «bots». Primero, los grupos organizados con el dinero suficiente para afrontar compras importantes. Su objetivo son productos de lujo con alta demanda. Por ejemplo, Gracey-McMinn cita el grupo que gastó tres millones de libras esterlinas en la adquisición de 70 coches BMW de una edición especial que fabricó la marca, de solo cien unidades. El segundo grupo está formado por los «amateurs», personas que simplemente buscan hacerse con productos con alta demanda para revenderlos con un beneficio importante. En último lugar están los grupos especializados, correspondiente a desarrolladores que gestionan foros en Internet y que cobran una cuota mensual por aconsejar y guiar a los que quieren introducirse en la materia. También proporcionan el software necesario para hacerse con los productos de interés y además recomiendan estrategias de precios.

Estos grupos no son minoritarios y cuentan con webs y medios sociales con cientos de miles de usuarios registrados y seguidore en todo el mundo. Los «bots» que se encargan de realizar las compras pueden adquirirse en estos foros y webs por precios que van desde los 22 euros hasta los 6.990 euros. El usuario tan solo tiene que descargar el software en su ordenador, establecer el objeto que quiere comprar y asociar un medio de pago. En el momento en que esté disponible, el «bot» realizará la operación y su felicidad navideña estará asegurada.