Energía

Trucos sencillos para ahorrar electricidad usando bien el frigorífico

Este electrodoméstico consume casi un tercio del total de energía de un hogar. Aún así, la OCU explica que es posible recudir su peso en la factura de la luz poniendo en práctica estos hábitos

En la imagen, un frigorífico ordenado
En la imagen, un frigorífico ordenadoUnsplashUnsplash

El frigorífico es el único electrodoméstico que está funcionando 24 horas al días durante los siete días de la semana. Por ello es, sin duda, el aparato que más contribuye a elevar la factura de la luz. En concreto, representa el 31% del gasto de electricidad de una vivienda. Reducir este porcentaje puede parecer misión imposible para muchos, ya que debe permanecer conectado a la corriente para mantener los alimentos frescos, pero este reto se puede conseguir gracias a unos sencillos y eficaces trucos recopilados por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).

Elegir un modelo eficiente

El primer paso para ahorrar es elegir un modelo eficiente. La nueva etiqueta energética agrupa a los electrodomésticos más eficientes en la clase B. La clase A, la más eficiente, ha quedado inicialmente desierta para dejar un espacio de mejora a la eficiencia energética de los nuevos producto. No obstante, si no tiene la posibilidad de renovar su frigorífico por uno que consuma meno, estos consejos también le permitirán reducir su factura de la luz.

Instalación

La ubicación del frigorífico también condiciona su consumo. Hay que evitar instalarlo cerca de una fuente de calor (radiador, horno, cocina eléctrica) o en un lugar soleado, ya que gastaría una cantidad mayor de energía para mantener la temperatura adecuada en el interior. De igual manera, es recomendable comprobar que alrededor del aparato circula aire suficiente. OCU aconseja no pegarlo a la pared y al menos dejar unos centímetros de espacio libre.

Uso

Usar bien la nevera será la clave que marcará la diferencia en su factura de la luz. Estos cinco consejos le ayudarán a conseguirlo:

1. No poner el selector de temperatura en un valor demasiado bajo: una temperatura interior de 5º C en el frigorífico, y de -18º C en el congelador es más que suficiente para conservar la mayoría de los alimentos.

2. No tener abierta la puerta del frigorífico sin necesidad: esta práctica sube la temperatura interior y de nuevo necesita gastar energía para conseguir otra vez un nivel óptimo.

3. Recordar pasar la aspiradora por detrás del frigorífico para quitar el polvo. El frigorífico “respira” y es importante que el intercambio de calor con el ambiente sea el correcto.

4. Descongelar de vez en cuando. Tres milímetros de escarcha en las paredes del congelador aumentan el consumo un 30%. Si después de limpiarlo vuelve a aparecer hielo enseguida es que la puerta ya no cierra herméticamente.

5. Limpiar, vaciar y desenchufar el frigorífico si va a estar fuera de casa una larga temporada.

Ahorrar colocando los alimentos

“Algo tan básico como colocar y ordenar bien los alimentos en el interior del frigo le ayudará a gastar menos electricidad y ahorrar energía”, explica la OCU. Para ello también da otros cinco consejos:

1. Aprovechar al máximo el volumen de la nevera, pero sin llegar a comprimir los alimentos.

2. Utilizar de la manera adecuada los distintos compartimentos del frigorífico: por ejemplo, recuerde reservar los cajones especiales de 0 grados (freezer) para los alimentos que más frío necesitan, como el pescado o la carne fresca.

3. Para congelar alimentos, asegúrese de que su congelador sea cuatro estrellas ****. Estos alcanzan una temperatura de entre -18ºC y -24ºC y son los únicos que pueden congelar alimentos.

4. Evitar meter comida caliente en la nevera y, desde luego, en el congelador.

5. Si no le basta con la capacidad del congelador de su nevera o de su frigo combi, plantéese comprar un congelador independiente.