La empresa Chariot pretende acelerar el desarrollo del campo de gas de Anchois, ubicado frente a la localidad marroquí de Larache. Este sitio podría estar operativo a partir de 2024, según el investigador del Centro de Políticas para el Nuevo Sur (PCNS), Francis Perrin; y el gas ser transportado a través del Gasoducto del Magreb (GME), reabierto por Marruecos y España.

“El permiso está en manos desde 2019 de Chariot Limited (75 %), una empresa con sede en Guernsey, y de la Oficina Nacional de Hidrocarburos y Minas (ONHYM, 25 %)”, recuerda Francis Perrin en esta publicación titulada “Perspectivas del gas de Marruecos: ¿dónde está el proyecto “Anchoveta”?”. Agrega que Chariot es el operador de Lixus, cuya superficie es de 1.794 km².

“Si bien conviene ser cauteloso en esta etapa sobre el alcance de las futuras reservas de gas de Anchois y el permiso de Lixus, ya que solo podemos hablar, por el momento, de recursos y no aún de reservas, el proyecto de desarrollo se basa en algunos activos clave, incluida la proximidad del gasoducto Magreb-Europa (GME)”, agrega.

España y Marruecos acordaron reabrir parte del GME, cerrado por Argelia. Este uso se hizo efectivo por primera vez a finales de junio de 2022, lo que permitió a Marruecos importar gas natural procedente del gas natural licuado (GNL) llegado a España donde ha sido regasificado.

Chariot pretende acelerar el desarrollo futuro de Anchois con vistas a ponerlo en producción “lo antes posible”, y junto a ONHYM, están trabajando en todos los aspectos de este proyecto y en el plan de desarrollo para poder llegar a la decisión final de inversión (DFI).

Los recursos posibles de Anchois se estiman en 637 mil millones de pies cúbicos (637 Gp.c.) de gas, o 18 mil millones de metros cúbicos, los recursos “prospectivos” en 754 Gp.c. (21,350 millones de metros cúbicos); y el remanente de recursos recuperables en 1,391 Gp.c. (39.400 millones de metros cúbicos).