Empleo

Los trabajadores acumulan 170 millones de días de baja, como si 709.000 empleados no hubieran trabajado ninguna jornada este año

Hasta agosto, cada mes se iniciaron 548.845 bajas, lo que supone un crecimiento de 28,9% interanual, según el último informe de contingencias comunes de Asepeyo. El 83% de los trabajadores no ha tenido ninguna baja

Las bajas laborales han crecido casi un 30% hasta agosto
Las bajas laborales han crecido casi un 30% hasta agostoJesus G feriaLa Razón

Las bajas laborales por enfermedad común continúan su ascenso imparable desde que la normalidad postpandémica volvió a la vida laboral. Así, el número de días de baja registrados entre enero y agosto acumulan 170 millones, equivalentes a la jornada anual de 709.000 trabajadores asalariados, el 4% del total de afiliados al Régimen General de la Seguridad Social. Esto significa que, de media, se iniciaron 548.845 bajas cada mes, lo que supone un crecimiento de 28,9% respecto al año pasado.

Así lo determina el “Observatorio de contingencias comunes” elaborado por Asepeyo y recogido por Efe a partir de datos propios y de la Seguridad Social, que destaca que hasta agosto se iniciaron casi 4,4 millones de bajas con una duración media de 38,74 días, con un incremento de las bajas significativamente superior a los registrados en otros años de recuperación, como 2021 (16,5%) o 2019 (15,6%).

El mayor crecimiento se ha dado en patologías psiquiátricas, que tienen mayor incidencia y duración, con el 10,04% de los casos y 113,10 días de media de baja, por delante de la patología de columna lumbar (9,28% de los casos) que en 2019 se situaba en primer lugar, un cambio en el que reconoce el informe la influencia de la pandemia y sus consecuencias ha influido mucho.

También destaca Asepeyo la subida en incidencia de la gripe y las enfermedades de vía aérea superior, un 4% más frecuentes que en 2021, aunque son las de menor duración media, con 7,60 días de baja. Todas las patologías que tienen que ver con el sistema musculoesquelético (columna lumbar, tendinosa, osteoarticular y fracturas) suman el 28,64 % de los casos de baja, con duraciones medias que van de los 69 a los 98 días.

La mayor incidencia se registra en las actividades administrativas y los servicios auxiliares, con 29.810 casos por cada 100.000 trabajadores, incluidas las empresas de limpieza, seguridad o mantenimiento, en las que las edades son más avanzadas y la actividad física es importante. La segunda mayor incidencia de la baja por enfermedad común es para las actividades sanitarias y de servicios sociales, con 27.823 casos por cada 100.000 trabajadores. En sentido contrario, destacan la construcción y la hostelería con el menor número de casos (16.271 y 19.677 por cada 100.000 trabajadores, respectivamente), aunque son sectores donde tienen una mayor incidencia los accidentes laborales.

Para el director el director territorial del área centro de Asepeyo, Constantino Perea, estas cifras son acordes a la mejora de la actividad económica, ya que el absentismo suele acompañar a los ciclos de recuperación, de forma que “crece en momentos de bonanza y cae en recesión”, como ocurrió en 2020, año de la pandemia en el que las bajas por enfermedad común cedieron el 21,6% (la baja por covid-19 se asimiló a accidente de trabajo a efectos de la prestación).

Navarra y Cataluña han sido las comunidades autónomas con mayor incidencia media mensual, con 49,68 y 44,54 bajas por cada 1.000 trabajadores, mientras que Extremadura se sitúa en el otro extremo con 19,25 casos por cada 1.000 trabajadores. Por contra, en las comunidades con menos bajas la incapacidad tiene una duración mayor, con 64,50 días de media en Extremadura, frente a los 25,97 días en Navarra, cuestión que tiene que ver con el tipo de actividad, la edad media del trabajador y las listas de espera para especialistas, entre otros factores.

De acuerdo con el informe, el 3% de los trabajadores afiliados al Régimen General acumulan el 22% de todas las bajas, con dos o más bajas por cada empleado. El 85% de estas bajas son de corta duración, lo que permite intuir “problemáticas personales o laborales” en muchos de esos casos, “que podrían solucionarse con una mayor comunicación entre empresa y trabajador”, apunta Asepeyo.

El perfil más común es el de una persona de 31 a 50 años, con antigüedad en la empresa inferior a 3 años, con una baja de corta duración que se suele iniciar a principios de semana. El estudio también ve puntos positivos en los datos, ya que el 83% de los trabajadores no ha tenido ninguna baja.