España

Berlín presiona a Draghi para que aparque la compra de bonos

Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo (BCE)
Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo (BCE)larazon

BRUSELAS- La estabilidad de la zona euro vuelve a depender del Tribunal Constitucional alemán. Hoy y mañana se celebra el juicio sobre la legalidad del programa de compra de deuda de los países en apuros anunciado por el Banco Central Europeo y que nunca ha sido necesario hasta el momento poner en práctica. El mero anuncio el pasado otoño de que el BCE estaba dispuesto a utilizar toda su artillería pesada para adquirir deuda de manera masiva ha sido suficiente para bajar la prima de riesgo de países como Italia o España, que hasta ese momento estaban sufriendo el acoso feroz de los mercados. Para el presidente del BCE, Mario Draghi, esta medida de política monetaria –conocida como OMT por sus siglas en inglés– es «probablemente la más exitosa» puesta en marcha últimamente. La Prensa germana apuntó a que Draghi limitaría a 524.000 millones la cantidad destinada a la compra de bonos, algo que fuentes del BCE se apresuraron a desmentir. Draghi tuvo que salir de nuevo ayer a dar explicaciones y aseguró que el programa de compra de bonos soberanos de la entidad no se utilizará con el fin de salvaguardar la solvencia de los países, sino de preservar la moneda común. La postura alemana responde a que este programa ya nació con la oposición del Bundesbank.

Jorg Asmussen, el miembro alemán del BCE y responsable de asuntos jurídicos, será el responsable de defender las tesis del Eurobanco en las sesiones de hoy y mañana, mientras que el propio presidente del Bundesbank, Jeans Weidman, argumentará que el BCE ha traicionado su mandato e independencia.