Movilidad

El Gobierno intenta armar una alternativa española para desactivar la OPA húngara sobre Talgo

Puente afirma que están "a la espera de que otros actores entren en juego" como alternativa a la oferta de Ganz-MaVag Europe

El Gobierno está maniobrando para armar una alternativa con empresas o inversores españoles que plante cara a la oferta pública de adquisición (OPA) lanzada por el consorcio húngaro Ganz-MaVag Europe por Talgo. Así lo ha asegurado hoy el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente.

Preguntado por la cuestión en un desayuno informativo organizado por Europa Press, el ministro ha afirmado que "estamos observando la OPA [de Ganz-MaVag Europe] con el máximo cuidado y a la espera de que otros actores entren en juego, inversores y otros fabricantes" preferiblemente españoles, según ha asegurado. Esa alternativa, ha añadido Puente, podría no obstante construirse "sin el auspicio del Gobierno de España, pero si hubiera que auspiciarla, valoraríamos esa opción. En eso estamos", ha remachado.

Reticencias

Desde que el consorcio húngaro anunció a finales del año pasado su intención de lanzar una oferta por el fabricante de trenes español, el Gobierno ha manifestado su desconfianza hacia una operación que considera sospechosa por las posibles conexiones de Ganz-MaVag Europe con Rusia. El consorcio está liderado por los empresarios György Bacsa y András Tombor. Este último es un empresario al que algunas fuentes vinculan con el gabinete de seguridad de Victor Orban entre los años 1998 y 2002. Orban, actual presidente húngaro, es un político al que se considera muy cercano a Putin.

Magyar Vagon, además, se creó en 2020 por Kristóf Szalay-Bobrovniczky, actual ministro húngaro de Defensa de Orban, y se ha consolidado en el sector ferroviario a través de privatizaciones en Hungría aprovechando su proximidad al Gobierno de Orbán.

Puente ha vuelto a dejar patente hoy la desconfianza hacia la oferta húngara al referirse al incremento de capacidad que, según Ganz-MaVag Europe, le aportaría a Talgo. El ministro ha reconocido que es evidente que el fabricante ferroviario tiene muchos pedidos que debe atender -su cartera asciende en este momento a más de 4.000 millones de euros- y es evidente que necesita que le aporten capacidad de producción. Sin embargo, ha añadido, "no tenemos claro que las fábricas de Hungría [que tiene Ganz-MaVag Europe y que suman más de medio millón de metros cuadrados] puedan adaptarse a la tecnología de Talgo y resolver sus problemas". "No es lo mismo tener una fábrica ahí, bueno, pues medio vacía, con una mano de obra acostumbrada, por ejemplo, a amolturar, que la tecnología de soldadura de aluminio. No parece que sea eso tan fácil de hacer en Hungría como se dice", ha justificado.

El ministro ha asegurado que aunque Tango es el fabricante de material rodante ferroviario español más pequeño, por "carácter histórico, españolidad y tecnología", el Gobierno debe protegerlo.

La estrategia anunciada hoy por Puente es similar a la ejecutada con Abertis. Cuando la compañía italiana Atlantia -ahora, Mundis- anunció su intención de adquirir la concesionaria española, la primera del mundo por kilómetro de peaje gestionados, el Ejecutivo español buscó un "caballero blanco" para que la compañía no cayese en manos italianas como ocurrió con Endesa y Enel. Finalmente, ACS mostró su predisposición a competir con Atlantia por la compañía y, finalmente, ambas llegaron a un acuerdo para hacerse prácticamente al 50% con Abertis.

Situación

Ganz-MaVag Europe presentó formalmente la OPA por Talgo el pasado 4 de abril tras depositar en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) el folleto con los detalles de su propuesta. La oferta es de 5 euros por acción, lo que supone valorar Talgo en 619 millones de euros a Talgo.

Días antes, el 22 de marzo, el consorcio solicitó autorización al Gobierno para cerrar la adquisición. El Ejecutivo se pronunciará una vez recibido el informe preceptivo, aunque no vinculante, de la Junta de Inversiones Exteriores (Jinvex), un órgano en el que participan diversos ministerios pilotado por la Secretaría de Estado de Comercio, que dispone de tres meses para su evaluación y que ya está trabajando en ello, según han trasladado desde Economía. Si la autoriza, la CNMV volverá a tomar las riendas de la OPA para comenzar su análisis y el folleto se haría entonces público. El control de inversiones exteriores se ampara en una publicación de la Comisión Europea, de abril de 2022, con orientaciones a los Estados miembros para garantizar una mayor vigilancia de las entradas de fondos procedentes de Rusia y Bielorrusia. En este contexto, España aprobó en julio de 2023 un real decreto de inversiones extranjeras, con un desarrollo posterior en una orden ministerial, de enero de este año. Las normas de control temporal de inversiones están vigentes hasta finales de 2024.

Hoy mismo, está previsto que el consorcio húngaro remita a la CNMV los avales bancarios necesarios para seguir adelante con la operación, apurando así el límite temporal que le permite la Ley del Mercado de Valores.