La robotización laboral: una amenaza a medias

Los expertos apuntan que la automatización del trabajo eliminará empleos pero ampliará las oportunidades.

Los avances tecnológicos llevan a cuestionarse cómo será el trabajo del futuro y a preguntarnos cuántos empleos puede llegar a destruir la automatización de las cosas. Según un informe de Adecco sobre el futuro del trabajo en España, un 65% de los profesionales de recursos humanos confiesa que la robotización destruirá puestos de trabajo de los que conocemos en la actualidad, pero creará en igual medida otros diferentes ampliando el abanico de posibilidades de los trabajadores del futuro. En cuanto a las razones, la mayoría coincide en que los empleos que se destruyan se verán, o bien compensados o bien superados en número y calidad por puestos de trabajo dedicados a crear soluciones de hardware y software. La inteligencia artificial está en un punto muy avanzado pero aún así los robots son incapaces de desarrollar la mayoría de las operaciones que la industria requiere, apuntan los expertos.

«La visión apocalíptica que se tiene de la destrucción de empleo por la robotización, no debería ser tal. La parte humana seguirá estando ahí aunque la tecnología haya entrado de forma disruptiva en nuestras vidas», explica Margarita Álvarez, directora de marketing y comunicación de Adecco. Según los expertos la tradicional división de la economía, que contemplaba el sector primario, el secundario y el terciario, se disolverá. Como consecuencia de la transformación del tejido productivo, nuevos sectores comienzan a liderar la creación de empleo, y otros lo harán los próximos años. Entre ellos el sector tecnológico y el de I+D+i, el de turismo y ocio, salud y bienestar y el energético. Áreas que darán lugar a nuevos proyectos empresariales y a nuevas figuras profesionales que deberán cubrir las necesidades de cada mercado.

Relevantes

Serán por tanto los perfiles cualificados ligados a la tecnología y al ámbito digital, los vinculados al trato con las personas y los especializados en marketing y ventas los que más relevancia alcanzarán en la próxima década. «Puestos de trabajo nuevos que hace cinco años no existían, para los que además hay pocas personas preparadas. Y es que las necesidades de las empresas se mueven a un ritmo superior a la formación académica que se está ofreciendo», explica Álvarez.

De hecho casi una de cada tres empresas consultadas confiesa que uno de los principales problemas a los que se enfrentan en la actualidad es el del desajuste entre la oferta y la demanda de profesionales, motivado en gran parte por la brecha formativa y de especialización de nuestro mercado laboral actual. En otras palabras, les cuesta encontrar perfiles acordes a sus necesidades. Un problema que podría incrementarse con la creación de nuevos puestos de trabajo que serán aún más específicos. De hecho, las habilidades de profesionales cualificados demandados supondrán el 13% de la demanda total de empleo en nuestro país, frente a la media del 25% en la UE, por lo que también se plantea un escenario de migraciones. Unos cambios que están llevando a las empresas a contratar talento, aunque no hay un puesto de trabajo concreto para el candidato. «A las empresas les están surgiendo necesidades diarias y una vez que tiene a la persona idónea es más fácil ponerla a trabajar de un día para otro», apunta la portavoz de Adecco. Cambian las cualidades que las empresas demandarán en sus trabajadores en 2020. Los expertos señalan que estarán más enfocadas a habilidades transversales que compartan todos los perfiles. Destacan las de colaboración, habilidades para gestionar el cambio, las técnicas y las de orientación a resultados, además de las interpersonales, como la capacidad comunicativa de los trabajadores, que adquirirán mayor importancia aún.