Distribución

Las ventas de cigarrillos, en mínimos históricos

Las ventas de cigarrillos se situaron en 2013 en mínimos históricos, al comercializarse 2.375,41 millones de cajetillas, lo que supone una caída del 11% respecto al año precedente, con lo que suma ya el quinto descenso anual consecutivo

Las ventas de cigarrillos se situaron en 2013 en mínimos históricos, al comercializarse 2.375,41 millones de cajetillas, lo que supone una caída del 11% respecto al año precedente, con lo que suma ya el quinto descenso anual consecutivo, según datos del Comisionado para el Mercado de Tabacos a los que tuvo acceso Europa Press.

En los cinco últimos años, coincidiendo con la crisis, el sector ha perdido terreno en el mercado, al pasar de 4.514 millones de cajetillas comercializadas en 2008 a casi la mitad (2.375,41 millones) el pasado año. Se trata de la cifra más baja de ventas registrada desde 1989, año en el que este organismo inicia la serie estadística.

El retroceso de las ventas en 2013, el mismo que el registrado el ejercicio precedente (-11%), tras un desplome del 16,7% en 2011, es más acentuado que los de 2009 (-9,9%) y 2010 (-10,97%) y se produce en un escenario de crisis marcado además por las modificaciones en los impuestos espaciales que gravan el tabaco y las subidas de precios.

A precios de venta al público en expendedurías, las cajetillas vendidas en 2013 alcanzaron un valor de 10.217 millones de euros, un 5,3% inferior a la facturación del año 2012.

En cuanto al resto de labores, las ventas de picadura de liar subieron un 6,3%, hasta 6,92 millones de kilos. La facturación se situó en 1.088 millones de euros, lo que supone un incremento del 25%.

Por contra, las ventas de picadura de pipa se redujeron un 39% en 2013, hasta 532.651 kilos, mientras que las de cigarros se situaron en 2.239,5 millones de unidades, levemente superiores (+0,74%) a los 2.223,1 millones de un año antes.

Marlboro, perteneciente a Philip Morris, se mantiene como la marca más vendida en el 'ranking' del mercado de cigarrillos en volumen, con una cuota del 13,36%. Le sigue Winston (Japan Tobacco International), con un 11,83% del mercado; Chesterfield, con un 9,31%

y Fortuna (Altadis), con un 7,78%.

Para Adelta (Asociación Empresarial del Tabaco), el comportamiento del mercado de tabaco en 2013, que retrocede al nivel de ventas de hace siete años, refleja las dificultades a las que se enfrenta la industria.

"La crisis económica, las fuertes subidas fiscales de los últimos años y el impacto del comercio ilícito de tabaco explican la caída del mercado. En el último ejercicio, el comercio ilegal ha alcanzado cifras récords superiores a los dos dígitos", han afirmado a Europa Press desde la asociación.

Con este punto de partida, Adelta considera que en estos momentos la prioridad es la lucha contra el comercio ilícito. Para ello, la asociación entiende básicas dos líneas de actuación: por un lado, mantener un marco fiscal estable, pues, en su opinión, se ha llegado

a una situación de "agotamiento"del mercado en el que un posible incremento impositivo ya no asegura una mayor recaudación; y por otro, reforzar los esfuerzos policiales de lucha contra el comercio ilícito de tabaco.

Repaso del año

En concreto, el inicio de 2013 estuvo marcado por movimientos al alza por parte de las grandes tabaqueras una vez que el Ministerio de Hacienda elevara el impuesto especial que grava el consumo de tabaco desde el 1 de enero de 2013 estableciendo un sistema de 'doble impuesto mínimo'.

A finales de junio, el Gobierno dio 'luz verde' a la subida fiscal del tabaco, con el alza del tipo específico de 19,1 a 24,1 euros por cada mil cigarrillos y la reducción del 'ad valorem' del 53,1% al 51%, mientras que el impuesto mínimo pasó de 123,97 euros a 128,65 euros por cada mil cigarrillos. Esta decisión provocó en julio una subida media de 10 céntimos en las cajetillas de cigarrillos de las principales marcas.

Las ventas de cigarrillos continuaron tras el verano su tendencia

a la baja, coincidiendo con la aprobación por parte del pleno de la Eurocámara de la nueva directiva sobre productos del tabaco, que obligará a aumentar el tamaño de las advertencias sobre los riesgos de fumar (que deberán combinar texto e imágenes) hasta cubrir el 65% de la superficie frontal y posterior de los paquetes de cigarrillos, en lugar del 40% en la actualidad.

El sector también conoció a finales de año que los estancos podrán vender ya cigarrillos electrónicos junto al tabaco tradicional, despúes de que el Comisionado para el Mercado de Tabacos haya considerado que este producto se encuentra dentro de los denominados artículos de fumador, según han informado a Europa Press en fuentes del sector.

De esta forma, el organismo dependiente del Ministerio de Hacienda ha abierto el abanico de puntos de venta para este tipo de productos, ya que en España sólo se permitía su compra en centros comerciales, tiendas especializadas o a bordo de un avión de una compañía 'low cost'.