Berlín

Rajoy pedirá a Merkel un impulso para el crecimiento

El presidente considera indispensable cooperar en materia de empleo. «Haremos lo posible para que las negociaciones sean un éxito», dice la canciller

La Razón
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La canciller alemana, Angela Merkel, ha recibido hoy en la sede de la Cancillería al presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, con motivo de la XXIV cumbre bilateral.

Un año después de su primera visita a Berlín como presidente del Gobierno, Mariano Rajoy ha vuelto a la capital alemana con la determinación de pedir a la canciller Angela Merkel medidas concretas de estímulo al crecimiento. Las cosas han cambiado desde aquel primer cara a cara oficial. España considera que ha hecho los deberes y es el momento de que la primera potencia económica de la Unión Europea (UE) cumpla su parte. Como ya hiciera en la Cumbre UE-América Latina y Caribe que, a finales de enero en Chile, el jefe del Ejecutivo instará a Alemania a adoptar políticas que contribuyan a paliar el desorbitado paro juvenil, que en España supera el 50%.

El tono de la relación entre los dos países ha ido cambiando de forma paulatina durante los últimos meses. El macroplan de reformas y ajuste del déficit adoptado por el Gobierno de Rajoy ha sido reiteradamente alabado en público y en privado por la canciller, y La Moncloa considera que están legitimados para requerir un avance sustancial en las políticas de crecimiento que saquen a la eurozona de la recesión.

Consejo Europeo

El encuentro se produce a sólo tres días del decisivo Consejo Europeo que negociará entre el jueves y el viernes el presupuesto comunitario para el periodo 2014-2020. Las negociaciones para fijar el recorte de las perspectivas financieras han sido intensas en las últimas semanas. En esta batalla presupuestaria, el Gobierno español se ha alineado con países como Francia e Italia, que respaldan la iniciativa del presidente del Consejo, el belga Herman Van Rompuy. La última propuesta del dirigente, rechazada por Berlín y Londres a finales de noviembre, estimaba que la merma del presupuesto europeo debía rondar los 80.000 millones de euros y fijarse en 973.000 millones.

El sector agrícola español y las comunidades autónomas periféricas, principales receptores de fondos, son los más afectados según sea la magnitud del recorte. Las últimas declaraciones de Van Rompuy hacen albergar ciertas esperanzas de que será posible alcanzar un acuerdo esta semana en Bruselas. La propia Merkel, en su mensaje semanal a los alemanes, se refería a la XXIV Cumbre hispanoalemana que se celebra hoy como el foro adecuado para tratar de acortar diferencias.

«Haremos lo posible para que las negociaciones tengan éxito. Ya he tenido un encuentro preparatorio con el primer ministro italiano, Mario Monti, y me satisface poder hablar también con Mariano Rajoy al respecto», apuntó la canciller. Merkel reconoció también la «urgencia» del consenso en un momento en que algunas economías permanecen «estancadas».

En este sentido, España considera indispensable abordar con el Ejecutivo alemán, que ya sufrió la lacra del paro juvenil hace una década, la cooperación bilateral en materia de empleo. El Ejecutivo espera recibir más detalles sobre las «medidas puente» anticipadas por la canciller en Davos para incentivar la contratación.

Rajoy llega a Berlín acompañado de los ministros de Exteriores, Economía, Empleo, Industria y los secretarios de Estado de Comercio y Educación tan sólo dos días después de negar la supuesta contabilidad B del Partido Popular (PP) tras la publicación de los «papeles de Bárcenas».

La Prensa alemana pasó ayer de puntillas por las acusaciones de corrupción que podrían empañar una cita en la que España defenderá ante Merkel los primeros signos de recuperación, el aumento de las exportaciones y el regreso de la financiación extranjera. El diario «Frankfurter Allgemeine» dedicó una breve referencia a las explicaciones de Rajoy y la web de «Der Spiegel» incluía en su portada una fotografía del líder popular para ilustrar un artículo sobre la cumbre de hoy y la crisis interna del PP.