Política

El Submarino: El diputado de los charcos

En Vox algunos empiezan a mostrar cierta preocupación en privado por la deriva de su diputado Juan Luis Steegmann. Y no, no por el tema de las vacunas precisamente. Las obsesiones de Steegman, y su manera de transmitirlas por las redes sociales, andan soliviantando incluso a los simpatizantes del partido. La última, a cuenta de su ataque a Halloween como «fiesta pagana y por lo tanto maligna», hilándolo con profanaciones, misas negras y hasta el asesinato de Lardero. Como termómetro, el silencio del resto de sus compañeros, que en esta ocasión no han salido al rescate como en otras.