Editorial

El submarino: Guerra civil «indepe»

La posible investidura de Pedro Sánchez con el visto bueno de Junts está desatando una intensa marejada en las filas independentistas.

El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont (d), y el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, al inicio de su primera reunión en el Palau de la Generalitat, el pasado 15 de marzo
Carles Puigdemont y (d)Pedro Sánchez, en imagen de archivolarazon

La posible investidura de Pedro Sánchez con el visto bueno de Junts está desatando una intensa marejada en las filas independentistas. Y es que los sectores vinculados a ERC no ven con buenos ojos el protagonismo adquirido por los de Puigdemont, que, al mismo tiempo, tienen sus propias tensiones internas, divididos entre «duros» y «posibilistas». Desde el entorno del PSOE reconocen que los interlocutores de su partido «van a sudar la gota gorda».