Armada

La Armada reparará el buque que encalló en Murcia por 25 millones

El cazaminas “Turia” quedó varado en agosto mientras buscaba al piloto fallecido al caer su avión en La Manga

El “Turia” quedó varado a pocos metros de la playa
El “Turia” quedó varado a pocos metros de la playalarazon

A finales del pasado mes de agosto, un buque de la Armada encalló en La Manga (Murcia) mientras participaba en las labores de búsqueda del piloto fallecido al caer su avión al mar. Se trata del cazaminas “Turia”, el cual quedó varado a escasos metros de la playa en la maniobra de recuperación del vehículo de exploración submarina con el que habían detectado restos de la aeronave siniestrada. Un incidente que causó una vía de agua, la “inundación de varios compartimentos” y daños en diferentes equipos. Ahora, seis meses después, Defensa ha aceptado desembolsar los 25 millones que costará su reparación.

Se trata de una cantidad sensiblemente inferior a lo que supondría adquirir un buque nuevo y que se suma a los 674.000 euros que costó recuperar el cazaminas del banco de arena en el que encalló y que obligó a contratar a una empresa extranjera. Una tarea que sufrióvarios retrasos y que al final se prolongó durante una semana hasta que pudo ser conducido a Cartagena.

En todo este tiempo, la Armada ha mostrado su intención de reparar el buque para mantener su flota de seis cazaminas (Segura, Sella, Tambre, Turia, Duero y Tajo) y garantizar así el cumplimiento de las misiones que tiene asignada la primera Escuadrilla de Medidas contra Minas. Finalmente ha conseguido cumplir su deseo “al mantenerse el equilibrio entre esa necesidad y el presupuesto de la reparación”, tal y como asegura en un comunicado.

A finales de enero, la Armada había finalizado el estudio de lo que costaría la reparación y se lo entregó a la ministra de Defensa, Margarita Robles, para que el Gobierno valorara su viabilidad. Una vez asentado el Ejecutivo, se ha optado por proceder a arreglarlo, una tarea que llevará a cabo Navantia, apoyada por empresas especializadas en cascos de fibra de vidrio. La reparación comenzará a partir de junio.

En un primer momento se apuntó a las malas condiciones meteorológicas como causa del incidente, pero pronto la investigación abierta al respecto señalaba más a un fallo humano o a una imprudencia del comandante, capitán de corbeta Francisco Javier Miró. De hecho, el Jefe de Estado Mayor de la Armada (AJEMA), almirante Teodoro López Calderón, dispuso a mediados de septiembre su cese, “relegándole así de su responsabilidad del ejercicio del Mando”. Con la investigación la Armada trató de conocer el grado de responsabilidad del comandante, si lo hubiese, valorando si se acercó demasiado y entró en una zona poco profunda a pesar de que el buque está equipado con potentes radares y un sonar.