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Defensa estudia crear una “reserva de guerra” de material sanitario

Un equipo de militares ya trabaja en un plan de contingencia para hacer frente a una crisis como la actual con las lecciones aprendidas en la “Operación Balmis”

Material sanitario transportado por el Ejército del Aire
Material sanitario transportado por el Ejército del AireLa RazónEjército del Aire

El Ministerio de Defensa está estudiando la creación de una reserva estratégica de material sanitario (equipos de protección, medicamentos, maquinaria...) para hacer frente en un futuro a una emergencia sanitaria como la del Covid-19. Así lo ha confirmado el capitán de navío Juan Alberto Cartelle, jefe de la sección deOperaciones Actuales del Mando de Operaciones (Mops), este jueves en un seminario online (webinar) de IDS Connect, en el que explicó con detalle todo el proceso de ejecución de la “Operación Balmis”y las primeras lecciones aprendidas de este despliegue sin precedentes, puesto en marcha hace ya más de dos meses.

Cartelle, en concreto, detalló que “una de las opciones que se está barajando es disponer de acopios, todavía hay que establecer los niveles, para poder acometer una situación simular en el futuro en el caso de que vuelva a darse”.

Un grupo de militares, añadió, trabaja ya en un plan de contingencia para hacer frente a una crisis como la actual. “Actualmente ya estamos trabajando la Sección de Planes de este Estado Mayor, junto con, por supuesto, los Ejércitos y la Armada y la UME”, especificó. Este plan tendrá en cuenta las lecciones identificadas durante las semanas de intensa lucha contra el coronavirus.

Cartelle, como responsable del centro de operaciones que ha recibido, coordinado y analizado las peticiones de apoyo a las Fuerzas Armadas, destacó que “la situación actual que vivimos es de tensa calma. No bajamos la guardia. La operación durará mientras dure el estado de alarma, lo que no quita, que los apoyos que las Fuerzas Armadas a la sociedad continúen a través de las operaciones permanentes”.

Balance de la operación

El primer balance del despliegue -subrayó Cartelle- muestra “una respuesta rápida, ágil y eficaz” de la Fuerzas Armadas, “al disponer de un mando centralizado claro en cada uno de los niveles: político, estratégico y operacional”.

El capitán de navío también resaltó que, en la ejecución de la operación, ha resultado clave el uso de medios abiertos, como correos o incluso whatshapp, complementado con los complejos sistemas militares, para dar órdenes y recibir informes de los mandos componentes; el método sencillo de solicitud a través de las delegaciones del Gobierno; y la adquisición de material centralizada en el Mando de Apoyo Logístico del Ejército (MALE).

Asimismo, un equipo específico ha estado centrado en los registros y gestión de la base de datos y el Mando de Ciberdefensa, por su parte, ha monitorizado el ciberespacio en busca de cualquier posible amenaza en la red para la operación.

Cifras de “Balmis”

En más de dos meses de despliegue, las Fuerzas Armadas han llevado a cabo 19.334 intervenciones en 2.253 poblaciones distintas, entre las que destacan 10.954 desinfecciones, 5.263 actuaciones en residencias y 3.268 en centros de salud.

Cartelle puso en valor el trabajo de los militares que han traslado a enfermos y fallecidos. “Una operación muy delicada y dolorosa”, recordó. Y también hizo hincapié en el esfuerzo del Centro de Farmacia Militar de Madrid, que ha producido desde el inicio de la pandemia 65.900 litros de solución hidroalcohólica, 21.000 envases de tres cápsulas de azitromicina y 250.000 envases de 20 cápsulas de paracetamol.