Los fiscales ya podrán inspeccionar de forma física las residencias de tercera edad y la situación de los presos

Hoy se levantan la suspensión de los plazos judiciales, con lo que el contador se pone a cero para interponer recursos, formular alegaciones, etc, entrándose, de esta forma, en una nueva fase de la desescalada judicial. En relación con esta nueva situación , los fiscales deberán reincorporarse en su totalidad a partir del próximo martes, día 9, fecha en que se incia la Fase 3 de esa desescalada. En este sentido, la fiscal general del Estado, Dolores Delgado, ha dictado un Decreto en el que se fijan las condiciones de la incorporación de la plantilla fiscal a su trabajo ordinario.

Así, a” partir del día 9 de junio debe producirse la reincorporación de todas las plantillas a sus puestos de trabajo de una manera preferentemente presencial”, siempre que así lo permitan las prescripciones sanitarias, las situaciones personales y las condiciones de las sedes de trabajo.

En relación con las causas abiertas los fiscales pedirán la prórroga de los plazos fijados para terminar las investigaciones, máxime cuando en el Congreso se tramita una iniciativa tendente a suprimir estos plazos de limitación.

En todo caso, la incorporación presencial a las sedes de los fiscales deberá “ir acompañada de la garantía de cumplimiento de las prevenciones establecidas por las autoridades sanitarias”. Así, si se ha tenido conctacto con alguien que ha tenido el covid no acudirá presencialmente a la sede de la Fiscalía, al igual que aquellos que puedan ser “vulnerables”.

En el mismo sentido, se mantiene como prioridad evitar, en la medida de lo posible, los “desplazamientos innecesarios”, así como potenciar el uso de medios telemáticos, en especial, las videoconferencias y el teletrabajo. A la vez la presencia de los fiscales en las salas de vistas será “la estrictamente imprescindible, y estará condicionada fundamentalmente a la disponibilidad y correcto funcionamiento de los medios técnicos necesarios.

Un aspecto relevante es que se alza la suspensión de las visitas o inspecciones presenciales o físicas de los fiscales a las residencias de mayores, personas con discapacidad, centros penitenciarios, centros de internamiento de extranjeros y de protección y reforma de menores, o cualesquiera otras visitas de similar naturaleza. Para la realización de estas visitas “se adoptará un criterio restrictivo, priorizando siempre que sea posible la utilización de medios telemáticos. El desarrollo de aquellas visitas que se realicen habrá de ajustarse estrictamente a las prescripciones sanitarias conforme a lo establecido por los servicios de prevención”.