Doce hombres sin piedad... contra Abascal

Sentenciada la votación, es hora del análisis. ¿Quién ha salido más reforzado? ¿Quién más debilitado? ¿Por qué será recordada la moción de Vox? ¿Ha sido tan rotundo el triunfo de Pablo Casado como todo el mundo parece dar por hecho? LA RAZÓN se ha puesto en contacto con el sociólogo Amando de Miguel, el experto en comunicación política Eduardo González Vega y el jurista e historiador Ignacio de Hoces para responder a estas y otras preguntas.

Lo primero que ha llamado la atención a de Miguel es la tensión que se vivió en el hemiciclo: «Me he acordado de las Cortes de principios del 36. Unamuno hablaba del «fulanismo» de aquellas Cortes». Y el sociólogo continúa: «Ha sido un circo muy interesante. Se suponía que iba a ser un trámite pero han pasado muchas cosas muy importantes. En mi opinión Abascal ha quedado como el único líder de la derecha, para bien o para mal. Apela a la conciencia y a la moralidad, algo muy poco habitual hoy en día. El PP podría haber dicho: no estoy de acuerdo con usted pero moralmente no tengo más remedio que votar sí. Eso es lo habría hecho un líder de la derecha, pero no lo ha hecho. Ha sido un discurso duro y desde el resentimiento. Parecía un voto de censura a Vox, distanciándose y no viendo la contradicción de que es gobernar con ellos en Madrid, Andalucía y Murcia. Para Casado, su enemigo era Vox. Los votantes no los tiene, solo a una parte muy pequeña: hemos visto un voto de censura a Vox de una forma furibunda, podría haber sido mas pragmáticas. A mi modo de ver supone el suicidio de Casado, muchos de sus votantes no están de acuerdo con lo que ha hecho. Abascal se ha quedado completamente solo como Henry Fonda en ''Doce hombres sin piedad''. Pero ya veremos cómo acaba la película...».

Para el jurista e historiador Ignacio de Hoces, a pesar de la ola de triunfalismo que parece que irradian las filas del Partido Popular, hay determinados signos que sugieren que ese partido debería ser más cauteloso ya que a una parte muy significativa del votante del PP, los discursos de Abascal le parecieron bien planteados, enormemente propositivos y con unas idóneas recetas para España. “Secundar la grotesca caricaturización que de Vox y de su líder hace la izquierda, no beneficia ni a las ideas del Partido Popular, ni a su propia estrategia. El PP se empeña en seguir contemporizando con los planteamientos de un Gobierno, que, además, persigue ideologizar a los españoles en un determinado sentido. Y contemporizar le está llevando a aceptar progresivamente las ideas y los chantajes que en forma de anzuelo y de cargos en órganos constitucionales le van periódicamente presentando. Y de seguir así, supondrá, irremediablemente, aumentar las posibilidades de Sánchez”, avisa.

Según de Hoces, el PP se equivocó en el fondo, en las formas y en los fundamentos políticos: “Ha parecido más una estrategia para contentar a determinados barones de su partido, que un discurso dirigido a ese centro derecha que tantas veces invoca para pretender aglutinarlo en torno a su figura. Y ese puente, hoy, por desgracia para muchos, lo ha debilitado el PP”, asegura

Sin embargo, el consultor del Centro Internacional de Gestión y Marketing Político Eduardo González Vega nos ofrece un análisis basado en las expectativas que cada partido tenía y su capacidad para establecer el marco mental del debate político a partir de este momento. Desde esta perspectiva, a su juicio, el PP ha sido el claro ganador porque partía de una expectativa baja y ha sabido aprovecharse al máximo de la oportunidad. «En uno de sus mejores discursos ha buscado el centro y ha ubicado al PSOE y a Vox en los extremos, poco menos que ignorando a Podemos y Cs. Ahora todos estamos hablando de lo que quiere el PP. Todo un éxito». En cuanto al PSOE no tenía mucho que perder pero tampoco ha sabido aprovechar la ocasión: «Casado ha descolocado a Sánchez. No ha podido instalar ese marco mental. La iniciativa de paralizar la reforma del proceso de selección de los miembros del CGPJ no ha tenido el efecto buscado y, además, ha dado la iniciativa a PP en el peor día posible». Vox también habría perdido su gran oportunidad: «Se ha quedado solo y ha errado en su estrategia. No ha conseguido sumar a nadie y eso le ha dejado muy aislado. La moción no ha sido lo mas acertado pero pienso que van a reforzar a los suyos y van a intentar rentabilizar el ''post debate'' situando a Casado en una posición tibia. Veremos a ver quien sale beneficiado...». Para González Vega tanto Podemos como Cs han pasado desapercibidos: «se han disuelto como un azucarillo. En cuanto a Cs, además, no ha conseguido muchos momentos de televisión y podría tratarse de la última oportunidad para Arrimadas».