Indultos

Sánchez rechaza la presencia de Junqueras en la “mesa de diálogo”

El presidente del Gobierno pide a los independentistas que den el “siguiente paso” y “hablen con la otra mitad de Cataluña”

El Gobierno mantiene desplegada su estrategia de pedagogía, seis días después de haber concedido los indultos a los líderes del “procés”. Pedro Sánchez ha reconocido hoy que “tiene la sensación de que no se va a arreglar de la noche a la mañana lo que se ha estropeado en 10 años”, en relación a la crisis de convivencia en Cataluña, en cuya resolución están “dando los primeros pasos”. El siguiente será su reunión mañana con el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, en la que está previsto que sienten las bases para la “mesa de diálogo” que no se prevé, tal como publicó este diario, que se reúna antes del verano.

La fecha es una de las incógnitas por desvelar, pero también lo es quiénes se sentarán en ella. Aunque durante las últimas semanas el presidente ha dejado entrever que no lo haría Oriol Junqueras, hoy se ha mostrado mucho más claro. Ha insistido en varias ocasiones en que “se trata de una mesa entre gobiernos”, incluso cuando le han interpelado sobre la posibilidad de que la presencia del ex líder de ERC se imponga como “condición”, y que, por tanto, Junqueras no forma parte de ese Govern. Y también ha recordado, para afianzar este argumento, que el líder soberanista indultado mantiene todavía intacta su inhabilitación para ejercer cargo público, lo que también sería un impedimento.

Sánchez ha reconocido sus cambios de postura sobre los indultos, pero ha defendido que “el PSOE siempre ha abogado por devolver a la política esta crisis. Para restaurar la convivencia lo útil es el perdón. En este sentido, el presidente del Gobierno ha remarcado que lo importante es avanzar y que el mensaje que se traslada al conjunto de la ciudadanía con los indultos es el de que “queremos avanzar y superar la crisis”. Si bien reconoce, en una entrevista en la SER, que la forma de pensar del Gobierno ha cambiado respecto al 155, defiende su actual postura y alega que “ahora lo útil para avanzar en la solución de esta crisis es el indulto. Las medidas de gracia son convenientes”.

Una actitud actual sobre la que recelan los propios independentistas que creen que es más necesidad que valentía, en este sentido, Sánchez ha asegurado que “hubiese indultado igual, con independencia de los votos de ERC”. Sánchez ha defendido que se está recorriendo el principio de un “camino largo”, para el que se va a necesitar “empatía y generosidad” y “aterrizar la política a las cuestiones concretas”. En este punto, el presidente del Gobierno ha adelantado qué es lo que el Gobierno le va a demandar a sus interlocutores catalanes como siguiente paso tras los indultos, que no es otro que “que reconozcan a la otra mitad de Cataluña, que tratan de invisibilizar porque no comparten su hoja de ruta”. “Que Cataluña hable con Cataluña”, que “escuchen a la sociedad catalana”, porque todos quieren “un futuro compartido” y hay que “hacer un esfuerzo”.

En el avance de ese camino, Sánchez cree que hay que ser “humildes y gradualistas” dando “pasos claros”. En este sentido, ha asegurado que hay que comenzar a abordar el diálogo por aquello en lo que sí están de acuerdo. “Si empezamos a hablar por aquello que nos separa es difícil el avance, hay que empezar por aquello en lo que estamos de acuerdo. “Más allá de las cuestiones territoriales, que nos separan, hay cosas en las que podemos estar de acuerdo”, ha destacado. El Gobierno piensa en financiación, inversiones y competencias y siempre dentro del marco de la ley.

“Oposición furibunda”

El presidente ha cambiado el tono conciliador respecto al independentismo, cuando se ha dirigido al PP, a quienes ha criticado que ejerzan la “oposición más furibunda que hay en Europa”. Sánchez les ha acusado de “utilizar la pandemia” para desgastar al Gobierno e incluso ha cuestionado que “hayan existido puentes” entre ellos, ante la posibilidad de renovar órganos constitucionales, que solo acuerdan cuando “están en el poder”. “Es una lectura ventajista de la Constitución”, ha señalado. En este punto, ha banalizado las amenazas de Vox de presentar una moción de censura y ha señalado que estos intentos, con los que también se ha alineado Ciudadanos, “demuestran una enorme frustración respecto a su falta de alternativa y de proyecto para Cataluña”.

En otro orden de cosas, Sánchez ha confirmado que finalmente sí se va a reclamar a los turistas británicos que lleguen a Baleares la vacunación o una PCR negativa. Ha desvelado que “mantiene de manera regular” el contacto con Iglesias, con quien trabó una relación “cordial” durante lo más duro de la pandemia” y ha fijado que la Conferencia de Presidentes se celebrará a finales de julio en Salamanca.