Casa Real

El Rey defiende el potencial del español para la innovación

Estrecha lazos con Portugal e Italia durante el XV Encuentro Cotec Europa

El Rey Felipe VI, el presidente portugués, Marcelo Rebelo de Sousa y el italiano, Sergio Mattarella, en Braga (Portugal)
El Rey Felipe VI, el presidente portugués, Marcelo Rebelo de Sousa y el italiano, Sergio Mattarella, en Braga (Portugal)HUGO DELGADOAgencia EFE

Es una de las citas anuales del Rey Felipe VI. La cumbre de Cotec Europa reúne a los jefes de Estado de España, Italia y Portugal que se encuentran anualmente en uno de los tres países, por orden rotatorio, y donde participan autoridades, líderes empresariales y personalidades relevantes del mundo de la innovación. La cita no es baladí ya que supone otra apuesta más de la Casa Real por la economía y la innovación en un momento especialmente complicado para las finanzas debido al aumento de la inflación y la guerra en Ucrania que está repercutiendo en la recuperación económica de Europa.

El Rey Felipe VI es el presidente de honor de Cotec España y fue el encargado de clausurar el encuentro. Durante su intervención en el XV Encuentro Cotec Europa, que se desarrolló ayer en Braga (norte de Portugal) bajo el lema «La cultura al encuentro de la innovación», el monarca puso en valor la lengua española para impulsar la innovación. En este sentido hizo un llamamiento a potenciar «las sinergias entre cultura, innovación y empresa» esgrimiendo la relevancia de la industria cultural a la hora de «fomentar la innovación en el sector económico y contribuir a la competitividad».

El Rey Felipe VI, el presidente portugués, Marcelo Rebelo de Sousa y el italiano, Sergio Mattarella, en Braga (Portugal)
El Rey Felipe VI, el presidente portugués, Marcelo Rebelo de Sousa y el italiano, Sergio Mattarella, en Braga (Portugal)HUGO DELGADOAgencia EFE

El monarca defendió que la cultura de la innovación «exige optimismo ante cualquier circunstancia, pues innovar implica asumir que las cosas siempre pueden mejorar». Pero para mejorarlas, subrayó, «primero hay que conocerlas».

De ahí la importancia, añadió, de recordar que «la fragilidad o la incertidumbre no van a desaparecer fácilmente de nuestras sociedades» y que «no se puede dar nada por garantizado, por seguro» sino que «todo lo que se ha conseguido puede estar en riesgo si no se continúa trabajando en su defensa y protección». Unas palabras que cobran sentido en un momento tan delicado como el actual ya que en cuestión de dos años Europa se han enfrentado a una pandemia y es testigo de un conflicto bélico que se está librando en sus fronteras.

Asimismo, prosiguió Felipe VI, la cultura de la innovación «también conlleva saber que el progreso no sólo se produce cuando el conocimiento contribuye a identificar y aprovechar oportunidades sino que también sucede cuando se utiliza para prevenir y contrarrestar amenazas como las que en estos tiempos convulsos se encuentran tan cerca». En opinión del monarca, «quizá el mayor legado» de las tres organizaciones Cotec –la española, la italiana y la portuguesa– «es precisamente haber fomentado este tipo de cultura en nuestros países» y «haber incorporado la innovación entre los atributos principales de nuestra cultura con la esperanza de que, si no para la nuestra, al menos para las próximas generaciones, la innovación sea una conducta asimilada con cercanía y plena normalidad».

El Rey Felipe VI, el presidente portugués, Marcelo Rebelo de Sousa y el italiano, Sergio Mattarella, en Braga (Portugal)
El Rey Felipe VI, el presidente portugués, Marcelo Rebelo de Sousa y el italiano, Sergio Mattarella, en Braga (Portugal)HUGO DELGADOAgencia EFE

Durante su viaje al país vecino, Don Felipe VI estrechó aún más lazos con los presidentes de Portugal,Marcelo Rebelo de Sousa y con el de Italia, Sergio Mattarella.Los tres jefes de Estado llegaron en coche y recorrieron a pie unos metros hasta la entrada del Theatro Circo de Braga –donde se celebró el acto– y fueron testigos del cariño de los bracarenses que se acercaron a saludarles. Según las imágenes distribuidas por Zarzuela, el Rey Felipe VI se interesó por la arquitectura del recinto, un orgullo y referencia de la cultura de la ciudad.