Joseba Asirón: Un hombre de paja de Otegui

Estaba cantado, pactado y consensuado. Joseba Asirón recupera el bastón de mando de la Alcaldía de Pamplona merced al acuerdo suscrito con EH-Bildu para apoyar la investidura de Pedro Sánchez. El llamado pacto «encapuchado», en palabras del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, consuma su primer acto en la infame entrega del Ayuntamiento pamplonés al concejal de la coalición abertzale. Un nuevo dirigente de la coalición separatista, definido por la alcaldesa saliente, Cristina Ibarrola, y la cúpula de Unión del Pueblo Navarro (UPN), ganadores de las elecciones, como un «hombre de paja» de Arnaldo Otegui, en la línea de blanqueamiento de los herederos del brazo político de ETA, y hoy socios preferentes de Pedro Sánchez. Con ello se da satisfacción a una de las históricas exigencias de los radicales independentistas vascos que consideran a la capital de Navarra, el antiguo Reyno, como la matriz de ese delirio llamado Euskal Herría. La decisión ha dejado girones y una profunda herida hasta en las entrañas del Partido Socialista de Navarra ( PSN).

José María Asirón Sanz es un historiador del arte, profesor de la ikastola San Fermín y que ya fue Alcalde de la capital navarra por EH-Bildu entre junio de 2015 y 2019. Nacido en Pamplona encima de la famosa churrería de La Mañueta, es Licenciado en Historia del Arte por la Universidad de Zaragoza y Doctor en la misma materia por la de Navarra con una tesis sobre las torres de linaje, casas fuertes y palacios de cabo de armería en la Navarra medieval. Profesor de la ikastola San Fermín se presentó en la lista de EH-Bildu a las elecciones municipales de 2016 y resultó la segunda fuerza más votada. Un pacto de investidura con Geroa Bai, la marca navarra del PNV, Aranzadi e Izquierda Ezkerra, le otorgó el sillón municipal frente al candidato de UPN, Enrique Maya, ganador de las elecciones. Ahora, la historia se repite y de nuevo Asirón se convierte en el regidor abertzale de la capital navarra. Se define como un «euskaldún navarro» y del Privilegio de la Unión de 1423, que unificó los tres burgos de Pamplona en el siglo XV.

En su intento de blanquear su figura y el apoyo a la moción de censura, el PSN defiende que Joseba Asirón en 1998, ante el asesinato por parte de ETA del concejal pamplonés Tomás Caballero, suscribió un manifiesto con otras personalidades del mundo de la cultura navarra de condena al terrorismo. «Nosotros, los euskaldunes navarros, en el umbral del siglo XXI, queremos manifestar nuestra total condena ante este criminal atentado» decía el documento. Durante su etapa como alcalde forjó una llamada Comisión permanente por la paz, la convivencia y los derechos humanos. «Es hora de mirar hacia adelante», insiste el ya nuevo investido regidor de Pamplona. Su nueva elección abre fuerte grietas en la sociedad navarra, incluso entre los socialistas de la Comunidad Foral que han preferido renunciar a sus actas de concejales antes de suscribir esta nueva rendición de Pedro Sánchez al partido de Arnaldo Otegui.