Cataluña

El PP cree que el debate de Margallo no altera la partida

La Razón
La RazónLa Razón

En las filas populares pasan página del debate entre el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, y el líder de ERC, Oriol Junqueras, con la sensación de que se han quitado un peso de encima. El balance más extendido es que el debate no va a alterar considerablemente la partida, que no suma, pero que tampoco va a ser un elemento determinante que reste más apoyos al Partido Popular catalán. «Ni fu ni fa», sostienen, de hecho, en medios gubernamentales. Los que pensaban que era una iniciativa «innecesaria» no han cambiado de tercio, pero tampoco creen que la intervención del ministro haya disgustado a los ya convencidos. «Uno y otro no molestaron a su electorado, y bastante es que salgamos sin heridas extraordinarias», afirman en Génova.

En el discurso oficial, cada parte barrió para casa. En el caso popular, el portavoz en el Congreso, Rafael Hernando, defendió que el titular de Asuntos Exteriores había hecho «un buen papel» en su debate con el líder de Esquerra porque puso en evidencia las «falacias y contradicciones» del independentismo catalán. «Cuantas más personas participen en el hecho de desmontar las falacias y las mentiras del proyecto independentista, pues me parece mejor», manifestó, aunque reconoció que no había visto el debate, que se celebró en la noche del pasado miércoles 23.

Como tampoco lo hizo el candidato del PP a la Generalitat, Xavier García Albiol. El candidato explicó que no lo vio porque estaba grabando una entrevista, aunque se mostró convencido de que «no va a cambiar el destino político de las elecciones del domingo ni decidirá el futuro de Cataluña».

Desde el lado independetista, el «número 1» de Juntos por el Sí, Raül Romeva, tiró para casa. A su juicio, el «cara a cara» sirvió para desmontar las «amenazas» del Estado contra una Cataluña independiente.

La cadena 8TV batió su récord de audiencia con el debate, pero, curiosamente, la mayoría de los portavoces en el Congreso de los Diputados no lo siguieron. El portavoz del PP, el del Grupo Socialista, el de Izquierda Plural y el del PNV coincidieron precisamente ayer en justificar por qué no siguieron el rifirrafe dialéctico entre el ministro de Exteriores y el «número 5» de la lista independentista, informa Efe.

Por otra parte, los partidos están ya preparando el día después de las elecciones. En el caso del PP, Rajoy ha convocado para el lunes a su Comité Ejecutivo en Génova, en una reunión que servirá para analizar los resultados electorales y fijar los primeros mensajes en función de cuál sea el resultado de las urnas. La dirección popular apela al «voto oculto» para mantener la esperanza en que el PP catalán consiga un mejor resultado que el que le auguran las encuestas.

Las últimas horas de campaña las aprovecharán en insistir en el llamamiento a la participación porque creen que los indecisos tienen la llave para frenar la mayoría de la lista soberanista.

Para justificar esta confianza en la movilización apelan a los resultados de anteriores autonómicas y cómo las urnas mejoraron a los sondeos.