Don Juan Carlos

El Rey cumple 75 años con «plena ilusión» por seguir al frente de la jefatura del Estado

Don Juan Carlos, que se recupera de su última operación de cadera y presidirá el domingo la tradicional Pascua Militar, es consciente y se prepara para un 2013 que se presenta "igual de intenso"que el año anterior, avanza este alto cargo de la Casa del Rey.

El Rey cumplirá mañana 75 años con "plena ilusión"por seguir desarrollando sus responsabilidades al frente de la jefatura del Estado y preparándose para un 2013 de "mucha actividad", asegura a Europa Press uno de sus colaboradores en el Palacio de la Zarzuela.

Don Juan Carlos, que se recupera de su última operación de cadera

y presidirá el domingo la tradicional Pascua Militar, es consciente y se prepara para un 2013 que se presenta "igual de intenso"que el año anterior, avanza este alto cargo de la Casa del Rey.

No pasa por su mente, por tanto, idea alguna sobre la abdicación, añade la misma fuente después de que una reciente encuesta de Sigma-Dos para 'El Mundo' haya revelado que ya son más los españoles partidarios de que abdique en el Príncipe (45 por ciento) que los que prefieren que el Rey se mantenga en su cargo (40 por ciento).

Este y otros sondeos de opinión publicados en los últimos meses ponen de relieve un deterioro de la imagen del Rey --al que superan en valoración la Reina y el Príncipe--, que se ha visto afectada por la imputación de su yerno Iñaki Urdangarin en un caso de corrupción y el polémico viaje de caza del monarca a Botsuana en abril pasado.

Zarzuela maneja encuestas internas que reflejan una recuperación de la imagen de la Corona, que suspendió por vez primera en la encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) de octubre de 2011, con una nota del 4,8.

Desde ese momento, el CIS no ha vuelto a preguntar explícitamente por la imagen de la institución, si bien esa consulta concreta no se realizaba con una periodicidad fija. La Casa del Rey asegura hoy que la imagen de la Corona ha regresado a niveles previos al episodio del viaje de caza del Rey a Botsuana y confirma que la imagen del Príncipe se ha resentido menos que la de su padre en estos años de desapego ciudadano hacia sus instituciones.

A diferencia de su 70 aniversario, cuando el Rey ofreció una cena de gala en El Pardo a 450 representantes en activo y retirados de las instituciones, este año no habrá ninguna celebración oficial por motivos de austeridad, explican en Zarzuela.

No obstante, TVE emitirá esta noche una entrevista al Rey conducida por el periodista Jesús Hermida, con quien hablará sobre su reinado, sin que haya preguntas de actualidad. El espacio se emitirá en diferido después de la segunda edición del telediario e irá seguido de un programa monográfico de Informe Semanal en el que representantes del mundo del arte, el deporte y la ciencia de la quinta del Rey, entre otros, hablarán del monarca. UN NACIMIENTO PREMATURO QUE PASO DESAPERCIBIDO

El Rey (Juanito para sus familiares y amigos) nació en Roma de forma prematura, ochomesino, el 5 de enero de 1938, con España sumida en plena Guerra Civil, por lo que la noticia pasó casi desapercibida.

A los tres años se convirtió en Príncipe de Asturias y con ocho le internaron en el colegio de los marianistas en Friburgo (Suiza), el Ville Saint Jean, unos días antes de que sus padres, Don Juan y Doña María de las Mercedes, se instalaran en Estoril (Portugal) para estar más cerca de España en caso de que los aliados forzaran la salida de Franco quien, terminada la Guerra Civil, se resistía a restaurar la Monarquía.

El enfrentamiento entre Franco y Don Juan no impidió en cambio que ambos pactaran el traslado del Príncipe Juan Carlos a España en 1948 para iniciar los estudios de Bachillerato.

En el verano de 1954, se produciría el primer encuentro entre Juan Carlos y su actual mujer, Sofía, a bordo de un crucero por el Mediterráneo, aunque esa primera presentación no tuvo consecuencia alguna. En 1955 ingresó en la Academia Militar de Zaragoza, iniciando así su formación militar y donde cumplió los 18 años.

Fue en las vacaciones de Semana Santa del 56 cuando se produjo el episodio fatídico de la muerte accidental de su hermano pequeño Alfonso. En la residencia familiar de Villa Giralda en Estoril, los dos hermanos juegan con una pistola, que se dispara y alcanza a Alfonso en la cabeza. Tras el entierro, el Príncipe regresa a España.

En 1960 acude por primera vez a la universidad, a la Facultad de Derecho, y en el verano de ese año vuelve a coincidir con Sofía de Grecia ('Sofi', para el Rey) durante la celebración de los Juegos Olímpicos de Roma. Ambos empiezan a verse desde entonces con frecuencia.

En septiembre de 1961, un comunicado de la Casa Real de Grecia anuncia el compromiso matrimonial entre ambos. Recién casados, la pareja alternaba estancias en Estoril y Atenas hasta que en 1963 se instalan en La Zarzuela. A finales de ese año nace la Infanta Elena; dos años después, la Infanta Cristina, y en el 68 el Príncipe Felipe.

Franco comunicó a Juan Carlos en julio de 1969 que le iba a nombrar sucesor a título de rey, oferta que el príncipe aceptó, saltándose a su padre, que aún confiaba en reinar en España y quien se sintió traicionado por su propio hijo. Padre e hijo tardarían meses en recuperar la relación.

El 31 de octubre de 1975, con la salud de Franco en un estado ya irreversible, el Rey asume las funciones de jefe de Estado y preside el Consejo de Ministros, que se reúne por vez primera en Zarzuela. El momento coincidió con la crisis con Marruecos, que había iniciado la Marcha Verde para anexionarse el Sáhara.

El 22 de octubre de 1975, dos días después de la muerte de Franco, es proclamado Rey. A su coronación en la Iglesia de los Jerónimos acudió una nutrida representación internacional, entre ellos el vicepresidente de EEUU, el presidente francés, el duque de Edimburgo y el príncipe heredero de Marruecos.

Después de que el Rey pidiera la dimisión en julio del 76 al presidente del Gobierno Arias Navarro y designara a Adolfo Suárez como nuevo jefe del Ejecutivo se aceleran los cambios que transformaron a España en una monarquía democrática.

La forma en la que el Rey pilotó la Transición, convencido de que

a él no le correspondía gobernar, sino ser el monarca de todos los españoles, y el papel que jugó frente a la intentona golpista del 23-F consolidaron su figura, que siempre ha gozado de gran popularidad y aceptación.

Su imagen no se ha resentido hasta tiempos recientes, como reflejó la encuesta del CIS de octubre de 2011, un deterioro al que contribuyeron posteriormente la imputación de su yerno Iñaki Urdangarin en un caso de corrupción y su polémico viaje de caza a Botsuana.