Interior
Interior formaliza la compra de un millar de chalecos antibalas para la Policía Nacional
Los agentes recibirán este material defensivo en un plazo máximo de tres meses después de la formalización de este contrato
La Policía Nacional dispondrá en un plazo de tres meses de un millar de chalecos externos de protección balística individual. El Ministerio del Interior de Fernando Grande-Marlaska formalizó esta licitación la semana pasada. El argumento para esta compra es que la dana de Valencia ocasionó numerosos daños en estos elementos de dotación de los agentes.
Este asunto ha cobrado más importancia tras los últimos episodios violentos que han sufrido los agentes. El pasado fin de semana un policía fue herido tras ser disparado por un narco con un arma de guerra en la provincia de Sevilla. El chaleco no pudo frenar la potente bala de este fusil.
La compra de los chalecos por parte del Ministerio del Interior se hace de forma periódica aunque se tienen que superar los largos procesos del Portal de Contratación. El 14 de mayo de 2025 fue cuando se aprobó el gasto de estos nuevos elementos de protección balística por un importe de 907.500 euros.
El contrato se adjudicó el 28 de agosto. El precio final asciende a 906.919,20 euros y la adjudicación del mismo se hizo el 7 de noviembre. Ahora, la empresa elegida, que tiene su centro den Cuarte de Huerva, tiene tres meses para entregar los chalecos.
La dana y los chalecos
No obstante, el argumento utilizado por el área de Fernando Grande-Marlaska para esta compra es que la inundaciones provocadas por la dana en octubre de 2024 en la Comunidad Valenciana, provocó el envío de numerosos efectivos en la zona en labores asistenciales y de prevención de la delincuencia.
"La realización de los trabajos encomendados a los diferentes efectivos de Policía Nacional ha provocado el deterioro de los elemento de dotación que estos portan, como chalecos, guantes, fundas o vestuario, siendo necesaria su reposición para poder afrontar los riesgos que su labor diaria requiere", señala el escrito.
De la misma forma, subrayan que los chalecos antibalas, anticuchillo y antipunzón son la última barrera entre los policías y el peligro inminente (disparo de arma de fuego o agresión con arma blanca), por lo que en su ausencia, se produciría necesariamente un daño para la salud de los intervinientes. "Este equipamiento de dotación individual resulta imprescindible para la protección del personal operativo de la Policía Nacional, y por tanto, el material a adquirir ha de reunir unas características técnicas y unas condiciones adecuadas de funcionalidad, resistencia y seguridad implícitas", finalizan.