La Asamblea Nacional investiga la financiación chavista a Podemos

La oposición pondrá la lupa en los 3,7 millones pagados a CEPS.

La Asamblea Nacional venezolana, de mayoría opositora, pondrá la lupa sobre la financiación del Gobierno bolivariano a Podemos. El diputado de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Julio Montoya, avanzó a LA RAZÓN que su grupo llevará a la Comisión de Controladoría (anticorrupción) los pagos del Ejecutivo de Hugo Chávez al partido español a través de fundación Centro de Estudios Políticos y Sociales (CEPS), así como su participación en el Banco del ALBA.

«Hay elementos suficientes para abrir esta investigación. La vinculación no es extraña, pero ahora tenemos herramientas para investigarla», apunta Montoya sobre las imágenes emitidas el miércoles por Antena 3 donde se puede ver a integrantes de la CUP, Podemos y del entorno de ETA en Barajas para viajar en un avión de las Fuerzas Armadas venezolanas (FANB), que habitualmente utiliza el presidente Nicolás Maduro.

Para Montoya, «el elemento nuevo ahora es que en esas imágenes todos son separatistas». Una «sorpresa» que expande la preocupación de la oposición venezolana sobre los lazos exteriores del Gobierno chavista. «Nos preocupa ver a Maduro implicado en los procesos secesionistas. Una cosa es opinar y la otra es participar en los asuntos de España», afirma el diputado, quien califica de «agresiva» la política exterior del presidente bolivariano.

En ese sentido, la oposición ahondará en los lazos entre Venezuela y ciertos actores políticos españoles, aunque las relaciones internacionales sean competencia del Ejecutivo. «Antes esas conductas pasaban desapercibidas, pero nosotros no lo vamos a pasar por alto. Las relaciones del Gobierno bolivariano son razón de Estado y de discusión internacional», advierte a este diario un miembro de la Comisión de Política Exterior, el opositor Ángel Medina, quien declaró que la MUD solicitará toda la información necesaria para detallar los vínculos exteriores del Ejecutivo de Maduro. «Es inadmisible que se utilicen recursos públicos para financiar a fuerzas de otros países cuando aquí no tenemos suficiente», se queja Medina.

Entre esos casos, los opositores recalcan los pagos de al menos 3,7 millones de euros del Gobierno de Chávez a Podemos a partir de 2002 a través de CEPS, la fundación afín a los izquierdistas españoles, así como la contratación de miembros de la formación por parte del Banco del ALBA, compuesto por Venezuela, Cuba, Bolivia y Nicaragua. En febrero del año pasado el ex número tres de Podemos, Juan Carlos Monedero, trató de justificar esos cobros presentando una factura de 425.000 euros por el asesoramiento a varios países latinoamericanos. Un documento que la oposición insiste en considerar «falso», mientras que Montoya sugiere que la cuantía podría ser mayor.

Los esfuerzos de la MUD para esclarecer el alcance de la política exterior del Gobierno responden a una demanda de exiliados políticos. Leopoldo López, padre del líder opositor encarcelado, denunció ayer la «intervención política» del Ejecutivo chavista, que, según él, «financia partidos políticos y estimula algunas posiciones» en España. «Es muy triste que un país al que le falta dinero para todo se lo gaste en asuntos como fletar aviones para hacer turismo político», lamentó.

Por su parte, Nicmer Evans, el analista político afín al chavismo, reconoce que tanto el líder de Podemos, Pablo Iglesias, como su número dos, Íñigo Errejón, y Monedero «han pasado tiempo en Venezuela y seguramente mantendrán comunicaciones», aunque matiza que las relaciones se han enfriado. «Si bien Podemos parte de la génesis de la izquierda latinoamericana impulsada por Chávez, el propio Gobierno de Maduro se ha separado de fondo de esas ideas», explica Evans.