Política

Dos años de la victoria del PP

La prima de riesgo es la mitad que en 2011 y el déficit comercial cae un 72%

La Razón
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«España está saliendo ya de la crisis con una economía saneada y reforzada, y aunque son muchas las cosas que quedan por hacer, tenemos la voluntad, el empeño y la determinación de hacerlas porque es lo que nos va a dar garantías de cara al futuro, crecimiento sostenido y estable, creación de empleo y mejora del nivel de bienestar de los ciudadanos». Esta frase, pronunciada hace menos de un mes por Mariano Rajoy, ejemplifica a la perfección una realidad que se percibe no sólo en el sentir de la ciudadanía, del empresariado y de las autoridades europeas, sino que también se refleja en buena parte de los indicadores económicos.

Tras varios años de duros ajustes y recortes, la mejora de la competitividad y del atractivo de la economía española empieza a trasladarse a las cifras. En este sentido, no hay duda de que hay tres parámetros que son los que mejor reflejan el retorno a la senda positiva: las exportaciones, el turismo y la prima de riesgo.

El comercio exterior se encuentra en tasas máximas hasta agosto, con más de 155.000 millones de euros en exportaciones de mercancías –nivel histórico más alto desde que hay registros (1971)–, con un comportamiento mucho más favorable que nuestros vecinos europeos. Así, el déficit comercial fue de 8.420 millones, cifra que contrasta con el elevadísimo saldo comercial negativo que tradicionalmente ha arrastrado España. De hecho, en el mismo periodo del año anterior la diferencia entre lo que compramos y lo que vendemos en el extranjero ascendía a 23.479 millones, mientras que un año antes, coincidiendo con la llegada de Rajoy a la presidencia del Gobierno, el déficit era de 30.630 millones.

En el sector turístico, España era ya una potencia de primer orden cuando Rajoy llegó a La Moncloa. Sin embargo, 2012 fue mejor que el año anterior y 2013 lleva camino de batir todos los registros de llegada de turistas. Sólo hasta septiembre, nuestro país ha recibido a 48,8 millones de turistas internacionales, un 4,6% más que en el mismo periodo del año anterior y nuevo máximo histórico.

La prima de riesgo ha sido uno de los principales caballos de batalla del Ejecutivo de Rajoy desde su triunfo en las elecciones generales de noviembre de 2011, cuando el diferencial de rentabilidad del bono español a diez años con el «bund» alemán superaba los 440 puntos básicos. Especialmente delicada fue la situación durante el verano de 2012, cuando la prima inició una escalada imparable que le llevó a superar los 600 puntos y que puso sobre la mesa la necesidad de España de pedir un rescate a Europa. Hoy, con la ayuda inestimable del presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, esa incógnita se ha despejado por completo y nadie duda de que nuestro país es capaz por sí solo de hacer frente a sus obligaciones. La prima ha caído hasta situarse ligeramente por debajo de los 250 puntos, igualándose además con el riesgo país de Italia, y con expectativas de bajar de los 200 puntos a lo largo de 2014.

El déficit público, desbocado a finales de 2011, ha iniciado una senda bajista, producto de los fuertes recortes en el gasto y las medidas para incrementar los ingresos. El PIB ha vuelto a tasas positivas y en 2014 podría crecer por encima del 1%. Hace dos años, el desfase entre ingresos y gastos fue del 8,9% del PIB; en 2012, del 6,9%; para este año y el que viene, la previsión del Gobierno es que el déficit caiga hasta el 6,5% y el 5,8%, respectivamente.

Todo esto ha provocado que los mercados recuperen la confianza en España perdida en el pasado, y eso lo está notando sobremanera el Ibex 35. El principal selectivo de la Bolsa española ha pasado de perder un 13,1% y un 4,6% de su valor en 2011 y 2012, respectivamente, a revalorizarse un 18,71% en lo que llevamos de año. Además, la inversión extranjera ha comenzado a volver a las empresas españolas, como demuestran operaciones como la entrada de Bill Gates en FCC o la compra por parte de un grupo americano de una enlatadora murciana por 1.200 millones de euros. «Antes había miedo a invertir en España y ahora hay miedo de perder la oportunidad de invertir», dijo hace sólo unos días el presidente de Morgan Stanley –el segundo mayor banco de Estados Unidos– en España.

Sin embargo, aún queda camino por recorrer para consolidar la salida de la crisis, siendo dos los eslabones más débiles en la cadena de la recuperación: el desempleo y el consumo. A pesar del mejor comportamiento del paro en los últimos meses, según la última Encuesta de Población Activa (EPA), el 26% de las personas que quieren trabajar no encuentran empleo, cifra que se dispara hasta el 56,5% en el caso de los más jóvenes. Sin embargo, el Gobierno confía en que, gracias a la reforma laboral, a mediados de 2014 pueda empezar a crearse empleo con tasas de crecimiento del PIB en el entorno del 1%.

Respecto al consumo interno, el pasado mes de septiembre representó un punto de inflexión: después de tres años de caídas continuas, las ventas del comercio aumentaron un 2,2% respecto al mismo mes del año anterior. Eso sí, ayudadas por la desaparición del efecto de la subida del IVA de septiembre de 2012.