Las víctimas denuncian que la decisión «avala los reconocimientos a los terroristas»

«Vergonzoso y desolador». Así es como califican las víctimas la decisión de la Audiencia Nacional de archivar definitivamente la investigación por la concesión, en 2013, del Premio Guernica por la Paz y la Reconciliación a Arnaldo Otegi y Jesús Eguiguren.

La resolución del tribunal se ha recibido con estupor en la Asociación Dignidad y Justicia (DYJ), impulsora de la querella contra el alcalde de Guernica, José María Gorroño, y el resto del jurado por enaltecimiento del terrorismo. «Es inasumible e inexplicable para nosotros, que hemos iniciado el procedimiento y lo hemos peleado hasta el final», se quejó el presidente de Dignidad y Justicia, Daniel Portero, quien recuerda que «desde que interpusimos la querella todo han sido pegas».

La asociación entiende que el archivo de la causa puede sentar un peligroso precedente. «En su día fue una absoluta vergüenza, pero el hecho de que ahora lo ratifique la Audiencia Nacional da pie a que se den más premios a terroristas, pues con este archivo se está avalando este tipo de reconocimientos», denunció Portero.

Para el presidente de Dignidad y Justicia, con decisiones como ésta el delito de enaltecimiento del terrorismo «prácticamente ha desaparecido del Código Penal y está perdiendo todo su peso». Además, el hijo del ex fiscal jefe de Andalucía Luis Portero, asesinado por ETA en 2000, se pregunta en voz alta qué mensaje se está enviando a la sociedad. «Me preocupa mucho que en este país se entienda que un terrorista condenado en sentencia firme ha colaborado a la contribución por la paz y la reconciliación», lamenta.

Por su parte, para la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) la decisión de la Audiencia Nacional sigue una triste tendencia. «Es desolador, pues de un tiempo a esta parte toda la justicia que pedimos la vemos rechazada. Lo que se archiva siempre perjudica a las víctimas y favorece a los terroristas», señala a LA RAZÓN su presidenta, Ángeles Pedraza.

Desde la AVT, además, llaman a las autoridades a no bajar la guardia. «Se siguen produciendo conciertos donde se humilla a las víctimas y, en muchos momentos, incluso en el Congreso de los Diputados se produce la apología del terrorismo con camisetas y mensajes», avisa Pedraza. Las víctimas muestran su preocupación, además, porque, en un contexto en el que «ETA ya no mata», la sociedad se está acostumbrando a este tipo de actuaciones y «los delitos de enaltecimiento están pasando a un segundo plano». Pedraza denuncia que se esté produciendo una pasividad generalizada. «Es triste que seamos sólo las víctimas las que denunciemos este tipo de conductas», apunta.

La indignación se apodera de la presidenta de la AVT cuando recuerda la concesión del premio a Otegi. «Es vergonzoso para todos los españoles, no sólo para las víctimas que le den este galardón, porque en España no ha habido ninguna guerra para que se necesite la paz y, si hablan de reconciliación, que lo hubieran pensado antes de matar a casi mil personas», sentencia.