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Tribunales

Leire Díez y Dolset cercan a Sánchez con las «cloacas»

El nombre de Antonio Hernando, pieza clave del gabinete de Moncloa, junto con Cerdán, apuntan a la mano del presidente en la estrategia

Leire Díez y Pérez Dolset, ante el juez que investiga maniobras contra la UCO y Fiscalía MariscalEFE

Leire Díez confirmó ayer al juez que se reunió en dos ocasiones con Santos Cerdán, entonces «número tres» del PSOE, en abril de 2024, justo el mes en que se imputó a la mujer del presidente del Gobierno y tras la jornada de reflexión que este protagonizó. Así lo trasladaron a LA RAZÓN fuentes presentes en su declaración judicial.

Por su parte, Javier Pérez Dolset, otro de los investigados en el «caso Leire Díez», reveló ayer, ante el magistrado Arturo Zamarriego, que estuvo presente Antonio Hernando en, al menos, uno de esos dos encuentros. El empresario detalló que se celebraron en la parte de «arriba» de la sede central de los socialistas de la madrileña y céntrica calle de Ferraz.

Hernando era, entonces, director adjunto del gabinete de Presidencia del Gobierno y, en la actualidad, ejerce de secretario de Estado de Telecomunicaciones en el ministerio de Óscar López. A nivel orgánico, es uno de los miembros de la Comisión Ejecutiva Federal.

En la cita en cuestión también participaron –según declaró Dolset– otras «ocho o nueve» personas que vinculó con la formación de Pedro Sánchez.

Volviendo a Díez, la conocida como «fontanera» explicó al instructor que conoció al que era secretario de Organización del Partido Socialista en aquel encuentro y que fue una periodista cercana a ella, Patricia López, quien propició la reunión.

Díez defendió que quiso ver a Cerdán para hacerle saber que se había estado «investigando ilegalmente» al jefe del Ejecutivo.

«Por la documentación de (José Manuel) Villarejo entendimos que el PSOE podía ser víctima de alguna de esas operaciones». Las que dirigió el excomisario de la Policía Nacional y que investigó la Audiencia Nacional en el marco del «caso Tándem».

«Igual que se había hecho con otros partidos y personas, se quería dar esa información (el partida)», afirmó la exmilitante socialista, apuntando que esta fue la razón por la que se sentó con Cerdán, tras varios intentos previos que fueron infructuosos.

Entre los frutos de esas indagaciones de Villarejo que quería poner en conocimiento de la cúpula del PSOE, figura información sobre el negocio de saunas que tenía el suegro de Sánchez, Sabiniano Gómez, en la capital.

Durante estos encuentros, hicieron entrega de audios en que al antiguo comisario, se le oye hablar de los establecimientos del padre de su esposa. Es el mismo material que luego Ferraz entregó en un USB a la Fiscalía General del Estado y que, hoy en día, está en manos, de la Fiscalía de la Audiencia Nacional.

En respuesta a otras cuestiones que le fueron formuladas, Díez negó que estuviese a sueldo del partido de Sánchez e insistió en que solo ejercía de periodista de investigación, cuando habría desarrollado las maniobras para conseguir datos comprometedores que afectasen a miembros de la Unidad Central Operativa (UCO), la Fiscalía Anticorrupción y profesionales de la judicatura. Según ella, solo vio al presidente en una ocasión en persona, cuando asistió a un mitin.

Respecto a las saunas de la mujer del presidente, hay que recordar que ya fueron mencionadas por Dolset en la conversación que mantuvo con el fiscal Ignacio Stampa y en la que también estuvo Díez. El empresario le contó al fiscal madrileño que Villarejo había «llenado de micrófonos» tanto las saunas como «la casa» de Sánchez cuando llegó a la secretaría general del Partido Socialista.

En este mismo audio, ahora en manos del titular del Juzgado de Instrucción número 9 de Madrid, se escucha a los supuestos emisarios del PSOE asegurar a Stampa que Sánchez estaba preocupado y quería saber quién tenía los documentos de Villarejo sobre las saunas de su suegro. Al respecto, el empresario aclaró que «nadie sabe dónde están.

En las declaraciones de ayer en Plaza de Castilla, ambos investigados mantuvieron que «no reconocen» la grabación de su reunión con Stampa del pasado mayo y otra de una llamada posterior que Díez hizo a este miembro del Ministerio Fiscal.

De hecho, sus defensas presentaron sendos escritos en que piden al juez Arturo Zamarriego la nulidad de este material probatorio y que no se tenga en cuenta en la instrucción.

La letrada de la exmilitante defiende que suponen una vulneración de sus derechos fundamentales, como el de intimidad, y apela a que la jurisprudencia del Tribunal Constitucional anula los archivos de «cámaras ocultas», cuando «se realizan en un lugar en que los intervinientes tienen expectativa de privacidad».

Díez compareció durante más de una hora y solo ha contestado a su abogada, a la fiscal y al magistrado Zamarriego. No ha contestado a ninguna pregunta que le ha dirigido la acusación popular.

Tal y como refleja el audio de la reunión en la que habría intentado sobornar al fiscal Ignacio Stampa, la «fontanera» se presentó ante este miembro del Ministerio Fiscal como «la mano derecha que nunca aparecerá» de Cerdán, dado que en un primer momento Luis del Rivero (ejerciendo de intermediario) le dijo que el que quería verle era el propio secretario de Organización socialista.

Díez aseguró, asimismo, al fiscal –que en secreto le grababa– que era «la persona que ha puesto el PSOE para qué hay detrás de todo esto» en referencia a los distintos procedimientos judiciales que comenzaban a salpicar al entorno personal y político de Pedro Sánchez.

En este mismo sentido se expresó Dolset, el empresario reveló que el jefe del Ejecutivo «mandó limpiar, caiga quien caiga la Policía Judicial de la Guardia Civil –al cargo de las pesquisas de casos como el de su esposa o el de David Sánchez–, la judicatura y hasta el Ministerio Público.

En marco de las presuntas maniobras investigadas, se vio, de igual forma, con el comandante de la Guardia Civil imputado en el «caso Koldo», Rubén Villalba; con Francisco Martínez, ex secretario de Estado de Interior durante el mandato de Mariano Rajoy, y supuestamente ofreció al fiscal José Grinda, a través del periodista Pere Rusiñol (ahora imputado), un destino en el extranjero, si ofrecía informaciones negativas que afectasen a su jefe en Anticorrupción, Alejandro Luzón.

En los próximos días, se conocerá si el magistrado accede a imputar a Cerdán, tras oír a la fiscal, como pidió Hazte Oír.