Independentismo

La CUP dobla la apuesta por la desobediencia

Los anticapitalistas convocan una manifestación para arropar a todos los cargos que desafían al Estado y tensan la cuerda con JxSí

«Sin desobediencia no hay independencia»
«Sin desobediencia no hay independencia»larazon

La CUP ha convocado una manifestación para el próximo día 7 de mayo en Barcelona para apoyar a todas los cargos electos catalanes que están desobedeciendo las leyes del Estado y ha pedido a los Mossos d'Esquadra que dejen de ser el "brazo ejecutor"de la Audiencia Nacional.

No puede extrañar a nadie que, poco a poco, vayan saliendo voces de Convergència como las de Germà Gordó que defienden la idea de «extender el diálogo» más allá de la CUP. La formación anticapitalista no está por la labor de asumir todos los cauces de la política institucional, algo que desespera particularmente a los dirigentes de CDC, ya que no tiene visos de solución. «Sin desobediencia no hay independencia», clamó ayer el diputado de la CUP Benet Salellas en un acto en el Fossar de les Moreres donde la formación asamblearia reivindicó la insumisión.

Concejales y diputados de la CUP se dieron ayer cita con el objetivo de arropar a los cargos de su formación que están desafiando la legalidad estatal con mociones de apoyo a la resolución rupturista del 9-N o con la izada de banderas independentistas. «La única manera de construir la república catalana es mediante la desobediencia», insistió Salellas en un acto en el que los «cuperos» se vistieron con camisetas rosas y lanzaron un llamamiento para no tener miedo.

Tan convencidos están de que éste es el camino para lograr la secesión que los anticapitalistas protagonizarán una manifestación el próximo 7 de mayo para dar su respaldo a todos aquellos que desbordan el ordenamiento jurídico español.

La estrategia de la CUP no hace más que aumentar la tensión con Junts pel Sí, molesta porque considera que la desobediencia no sirve para aumentar la bolsa de electores independentistas. En breve, el Parlament volverá a ser el escenario de las discrepancias del bloque soberanista, puesto que no hay manera de que la CUP y Junts pel Sí alcancen un acuerdo sobre una moción que los anticapitalistas han registrado para ratificar la declaración rupturista que anuló el TC.

El portavoz de JxSí en el Parlament, Jordi Turull, insistió a la CUP en que modifique la moción para que «no implique a los funcionarios del Parlament y a los Mossos d’Esquadra. Así lo dijo en una entrevista en Rac1, donde afirmó que el problema de la moción no es que pida al Govern aplicar la resolución independentista, sino asegurar que la «responsabilidad y las consecuencias» de ella sean sólo para los 72 diputados soberanistas. «Creemos que en este momento procesal debería ser una moción en positivo», pidió Turull una vez más, sin gran predicamento.

PUIGDEMONT SE PONE FECHA DE CADUCIDAD

El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, pasará a la historia de Cataluña, muy probablemente, como el más breve de la historia contemporánea. Así lo confirma el propio Puigdemont en el libro «Em dic Carles. De què està fet el president», donde asegura que su presidencia no tendrá continuidad porque la nueva etapa requerirá «nuevos perfiles».